El PP acusa a Mollà de trato de favor y pide al alcalde su destitución para no ser cómplice

ELCHE. El portavoz adjunto del grupo municipal popular de Elche, Vicente Granero, ha vuelto a pedir responsabilidades tanto al tripartito de Elche como a Mireia Mollà a quien acusa de realizar “un trato de favor” y de “mentir” por lo que añade que si el alcalde de Elche, Carlos González, “no asume responsabilidades en este tema, está siendo cómplice de los hechos”.

En base al escrito presentado por el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España de la Comunidad Valenciana, Granero señala que en el mismo se apunta que a Mollà no la llamaron los vecinos para que mediara en la intervención policial sino que se encontraba en el interior de la fiesta y fue requerida por el propietario para que interviniese y no cerrara el local que no tenía ni licencia para fiestas, ni para música y duplicaba el aforo.

Para Granero, lo que hizo la portavoz de Compromís per Elx fue “intentar obviar la actuación policial y no fue una actuación pasiva, simplemente con ellos, sino que llamó al jefe de la Policía Local para que no se hiciera lo que marca la ley” por lo que en palabras del portavoz adjunto del grupo municipal popular de Elche “eso es trato de favor, es tráfico de influencias y eso es corrupción política”. 

“Ha hecho un trato de favor y ha mentido y eso es una causa más que suficiente para que dimita”, precisa Granero quien añade que si el alcalde de Elche, Carlos González, no toma la decisión de destituirla en sus funciones va a ser cómplice de este trato de favor”.

Además, Vicente Granero, cuestiona el silencio del concejal responsable de la Policía Local de Elche, José Pérez, y por qué no defiende a la Policía Local.

Por otra parte, el portavoz adjunto del grupo municipal popular de Elche recuerda que a principios de la legislatura ya dimitió la concejala socialista Purificación Vives “por un trato de favor” y en aquel momento el alcalde de Elche “alabó ese comportamiento”.

No entendemos ahora, continúa Granero, “la pasividad del alcalde ante esta situación y nos preguntamos las causas que llevaron a que una concejal sí dimitiera hace más de un año y sin embargo no se pronuncie en relación a la actuación irregular de Mireia Mollà”. 

La polémica de la fiesta de Nochevieja surgió a raíz de una denuncia pública de Ilicitanos por Elche en la que se acusaba a Mireia Mollà de mediar para que la Policía Local de Elche pasara por alto las presuntas irregularidades detectadas en un establecimiento de Torrellano. En aquel entonces, Mireia Mollà defendió que únicamente se encargó de telefonear al jefe de la Policía Local para que optara por una solución pacífica ante la saturación de gente que había en el establecimiento.