ALICANTE. Los premios de la Asociación Nacional de Obtentores Vegetales, Anove, cuyo objetivo es poner en valor y reconocer la labor de aquellas personas o entidades que contribuyen a promover la alimentación saludable y sostenible en toda la cadena de valor, se entregaron el pasado jueves 6 de junio en Sevilla. El microbiólogo de la Universidad de Alicante (UA), Francis Mojica, recibió el premio en la categoría de "Nuevas Técnicas" por el descubrimiento y estudio de los sistemas CRISPR-Cas y su contribución al desarrollo del sector agroalimentario. Le hizo entrega del galardón el presidente de Cajamar, Eduardo Baamonde.
Durante su intervención, Mojica puso en valor la labor de investigación de España y la necesidad de seguir invirtiendo, pues sin investigación e innovación es imposible dar respuesta a los retos que tanto en agricultura como en otros campos se presentan cada día.
En total, en esta primera edición de los Premios Anove se entregaron cinco premios: al microbiólogo de la UA Francis Mojica, a la eurodiputada Clara Aguilera, al chef Rodrigo de la Calle, a los servicios informativos de TVE y a Vicente Navarro, reconocido por su experiencia en la industria de las semillas y la agricultura.
La ceremonia, celebrada en el Hotel Alfonso XIII de Sevilla, contó con la presencia del Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Plana Puchades, que recibió un premio honorífico. El acto fue conducido por Carlos Latre que puso un punto continuo de humor.
Los premios Anove, asociación presidida por Javier de Sebastián, han estado organizados en colaboración con el Grupo Joly y el patrocinio oro de Cajamar, patrocinio plata de Grano Sostenible y Fruit Attraction de la mano de Fepex. Y además 17 de socios de Anove son patrocinadores bronce (Bayer, Bejo Ibérica, Corteva, HM Clause, Intersemillas, Lidea, Limagrain, Masia Ciscar, Basf, Planasa, RAGT, Ramiro Arnedo, Rijk Zwaan, Sakata, Semillas del Guadalquivir, Semillas Fitó y Syngenta).
Un estudio internacional liderado por científicos españoles descifra el origen de la herramienta de edición genética Crispr y constata su actividad original. El trabajo, publicado en la prestigiosa revista científica Nature Microbiology, abre nuevas vías en la manipulación de ADN y en el tratamiento de enfermedades como el cáncer o la diabetes