ELCHE. Finalmente no habrá un recorte en la inversión prevista este año para la redacción de los centros sociales de las pedanías de Torrellano, El Altet y Arenales del Sol de la que se pensaba dejar el grueso de los 600.000 euros para 2021. Tampoco el recorte de 900.000 euros en el capítulo 1 que influía en una Oferta Pública de Empleo para la Policía Local. Todo porque encima de la mesa hay un acuerdo inminente, según asegura el alcalde Carlos González, entre la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y el Ministerio de Hacienda, dado que 2020 quedará para los ayuntamientos libre del 'techo de gasto'. Al no tener que establecer medidas correctoras por haber incumplido la norma en 2019, se anula el Plan Económico Financiero del Consistorio que suponía pasar una vez más la tijera por el presupuesto del actual ejercicio.
Como tal, ahora el equipo de gobierno retira del orden del día del pleno de este lunes el punto de Plan Económico Financiero que se había estado ultimando. Ni se declara la "no disponibilidad" parcial de las partidas para los mencionados centros sociales ni se recorta el capítulo 1. Según la edil de Gestión Tributaria, Patricia Macià, "ese dinero irá a paliar gastos de otras partidas del capítulo 1 como refuerzos de seguridad, pues este verano se ha tenido que contratar muchos por la situación sanitaria y de cara a final de año habrá que reforzar servicios".
Hasta ahora, desde el equipo de gobierno, tanto PSOE como Compromís, se había venido incidiendo a través de la FEMP y de cara al público en la necesidad de flexibilizar el techo de gasto para aquellos Ayuntamiento saneados y con superávit, como es el caso del ilicitano. Si bien se estaba a la espera de poder invertir un 20% del remanente de tesorería del año anterior en gasto social, ahora queda ver de qué forma se va a abordar el no tener que cumplir con la normativa del techo de gasto, vigente desde que Cristóbal Montoro fue ministro de Hacienda con el Gobierno de Mariano Rajoy. Hasta ahora, el remanente iba o a amortizar deuda con bancos o a Inversiones Financieramente Sostenibles (IFS) que consignar presupuestariamente al año siguiente para no tener que amortizar.
En el acuerdo "al 90%" —según el regidor— entre la FEMP y el Ministerio, que se firmará la semana que viene y desembocará en un Real Decreto Ley, una de sus consecuencias será la aplicación del remanente de tesorería, aunque es uno de los factores que se está debatiendo: qué formula aplicar y cómo. "Lo que ya está claro es que no se va a exigir la regla de gasto como hemos venido exigiendo". Creen que sea cual sea la fórmula del acuerdo, "va a posibilitar que podamos utilizar ese remanente con el mecanismo que se establezca". Un balón de oxígeno presupuestario para el Ayuntamiento que podrá invertir en distintas cuestiones, a priori.
