Dado que desea, como mínimo, incorporar a otro jugador mayor de 23 años, Javier Portillo tendrá que conceder al menos una baja. Este martes Domingo Sevillano, agente de Juli, declaraba a Alicante Plaza que el delantero alcoyano no estaba por la labor de acceder a rescindir el contrato que le une con el Hércules hasta el 30 de junio de 2020 e incluso puntualizaba que no se había reunido con el director deportivo blanquiazul, pese a que es un secreto a voces que Juli y Jona Mejía están en la rampa de salida, especialmente el primero para Portillo y ambos para el técnico, Lluís Planagumà.
Lo lógico es pensar que si no van a tener minutos accedan al menos a negociar una rescisión, pero por ahora parece que no se ha llegado a esa fase. Ahora bien, de concretarse una nueva incorporación de un futbolista sénior, los acontecimientos habrán necesariamente de precipitarse para hacerle sitio al fichaje.
Dieciséis sénior
El Reglamento General de la Real Federación Española de Fútbol, en su artículo 121.2, establece que en Segunda División B cada equipo puede contar con un máximo de 22 jugadores de los que no más de 16 podrán ser sénior (el mínimo de sub-23, por tanto, es de seis, no existiendo tope máximo (en el primer equipo también pueden jugar sub-23 que tengan ficha del filial) y al menos 10 habrán de contar con licencia profesional.
Los 16 los futbolistas sénior con que cuenta el Hércules en su primera plantilla son: Ismael Falcón, Felipe Alfonso, Álvaro Pérez, Samuel Llorca, Pablo Íñiguez, Rulo Prieto, Fran Miranda, Diego Benito, Jesús Alfaro, Yeray González, Moha Traoré, Carlos Martínez, Juli, Alejandro Alfaro, Jona Mejía y Benja.
