ALICANTE. Operación renove en el que pasa por ser uno de los decanos entre los hoteles de origen familiar en Alicante: el Hotel San Remo. El actual propietario del establecimiento, un inversor argelino, acaba de impulsar una reforma integral del edificio, situado en la confluencia entre las calles Navas y del Teatro, con el propósito de actualizar su infraestructura por completo (conducciones, baños, sistemas eléctricos, etc).
Además, se ha renovado su fachada, se ha modernizado el interiorismo de sus 27 habitaciones y se han equipado con nuevo mobiliario ajustado a las condiciones de su categoría (una estrella), al tiempo que se ha aprovechado para habilitar una habitación más.
SE CONSTRUYÓ EN 1967 EN UN CONTEXTO EN EL QUE TAMBIÉN ABRIERON SUS PUERTAS EL CERVANTES O EL RIALTO, TAMBIÉN EN PLENO CENTRO
La remodelación se inició a principios de año con la intención de que el establecimiento pudiese reabrir con la llegada de la campaña de verano. Sin embargo, la irrupción del coronavirus y la consiguiente declaración del estado de alarma retrasaron su ejecución hasta el punto de que todavía no ha llegado a producirse su reapertura. Los trabajos están en su última fase, pero todavía sigue sin fecha para la admisión de huéspedes.
Prácticamente desde su inauguración, el San Remo ha estado ligado a la familia Giner, que ha acometido varias remodelaciones internas precedentes para procurar una estancia más agradable a sus clientes y seguir resultando una opción atractiva para disfrutar de una estancia en la ciudad a precios asequibles.
Sin embargo, la familia -que sigue ligada a su gestión- acabó transfiriendo su propiedad al encontrar un inversor interesado en asumir su explotación. El establecimiento se construyó en 1967 en un contexto en el que proliferaron otros establecimientos de gestión familiar, como el Hotel Cervantes o el Hotel Rialto. Los tres se concentraron en el mismo entorno, al calor de la actividad cultural del Teatro Principal y de la cercanía con la playa de El Postiguet.