BENISSA. “Derechos urbanísticos”. Este ha sido uno de los argumentos más repetidos en la comparecencia de prensa del alcalde de Benissa, Arturo Poquet, del PP, y del edil de Estrategia Urbanística de Benissa, Isidor Mollà, en la que han querido despejar dudas sobre el convenio urbanístico que ha presentado una empresa para construir un hotel y nueve unifamiliares en primera línea de mar, el Patmore Resort.
El proyecto iría en una parcela de 55.000 metros cuadrados de suelo urbano “consolidado” entre la cala Els Pinets y La Llobella. Pero pese a que han comparecido juntos las posiciones ante el proyecto parecen estar alejadas. Mollà ha mostrado su postura en contra de este proyecto, al menos tal y como está planteado.
“Este plan no lo veo”, ha repetido en varias ocasiones, aunque sí que ha indicado que considera que podría edificarse un hotel con parámetros de baja densidad. Para ello ha apelado a las “habilidades negociadoras de los políticos”, con el fin de compaginar los derechos de los propietarios y preservar el mayor espacio posible en esta zona. Esto supone que si no hay cambios el plan no saldría adelante si llega al pleno.
Tanto Mollà como Poquet han descartado una posible expropiación del terreno, ya que esto podría endeudar a la población y no se quiere cometer “el error” de otras ocasiones en temas parecidos, que han costado mucho a la población. La cifra rondaría los 15 millones, que al parecer es el precio por el que está a la venta la parcela y que coincide con el presupuesto anual de la población.
El alcalde, por su parte, ha incidido en que el convenio ha llegado al consistorio por parte de una empresa privada que tiene interés en desarrollar el proyecto y por ello ha seguido sus trámites y ha salido a exposición pública. “Ahora los técnicos responderán a las alegaciones”, ha precisado.
Pero el primer edil ha remarcado que la parcela es suelo urbano consolidado, por lo que no dar permisos de obra sería incumplir la ley. En estos momentos esta superficie permite la construcción de un hotel y de unifamiliares. Pero el convenio de la empresa Benissa Natura plantea una redistribución de los usos para edificar viviendas y el alojamiento y ceder a la localidad un total de 16.000 metros frente al mar que puedan dar continuidad al paseo ecológico que hay en Els Pinets.
Poquet ha remarcado que salga o no adelante el convenio los propietarios pueden pedir permiso de obras y se les tiene que dar, recordando que cuentan con derechos urbanísticos. Además, ha remarcado que en su día se solicitó al Consell que incluyera estos terrenos en el Pativel, algo que descartaron por la situación de suelo urbano.
Han recordado que existe un Plan General del año 1982 que tipifica este suelo como urbano y le da espacios hoteleros y para las viviendas, además de que este documento está en fase de revisión pero que no estará finalizado en un plazo corto de tiempo. Lo que sí está sobre la mesa es una posible suspensión de licencias, como ha reclamado Compromís per Benissa.
“Tenemos que buscar soluciones imaginativas para poder compaginar los derechos de los propietarios”, ha dicho Mollà. Por ese motivo no se descarta establecer un plazo de dos dos años de suspensión de licencias para poder abordar el tema y hablar con todas las fuerzas políticas para llegar a un acuerdo para esta zona.
Poquet ha añadido que respeta que haya vecinos de la población y de otros lugares que se manifestasen el pasado sábado en contra de este convenio, pero ha indicado que el concepto era falso, ya que las consignas decía que ‘La Llobella no es ven’. Ha indicado que el Pativel no protegió las parcelas urbanas que hay en la zona y que si unos propietarios han obtenido licencias de obras no se les pueden negar a otros.