ALICANTE. El proyecto promovido por la empresa AG Valores para instalar un campamento turístico junto al saladar de Aguamarga supera el primer trámite administrativo ante la Conselleria de Política Territorial y Obras Públicas: la obtención de la Declaración de Interés Comunitario (DIC) que resulta necesaria para su construcción, condicionada, eso sí, a la subsanación de documentación. Así, su concesión y el posterior desarrollo del proyecto -en una propuesta que se registró en diciembre de 2019- todavía no tiene el camino completamente despejado.
Según fuentes consultadas, la compañía debe aportar ahora un estudio acústico para evaluar el posible impacto que pudiese tener sobre su actividad el funcionamiento de las desaladoras Alicante I y Alicante II, gestionadas por la Mancomunidad de los Canales del Taibilla en la misma partida de Aguamarga. Además, AG Valores también debe presentar un estudio de tráfico sobre la afección que el tráfico asociado al funcionamiento del campamento turístico pudiese tener sobre los accesos a esas mismas plantas. Y por último también debe aportar un informe de planificación.
El planteamiento de AG Valores consiste en la creación de un campamento turístico ecológico provisto de 378 parcelas de 100 metros cuadrados cada una con zona de acampada y área para el estacionamiento de caravanas. También contempla la instalación de 30 apartamentos o bungalós, además de piscinas, pistas de tenis, de pádel y de baloncesto. Las instalaciones se extenderían sobre una superficie de 120.800 metros cuadrados de suelo no urbanizable, situado frente a la denominada Cala Barda, entre el polígono industrial de Aguamarga, el trazado de la línea de cercanías Murcia-Alicante y el acceso sur a Alicante a través de la CN-332.
En el conjunto de ese espacio, solo se computaría un total de 6.273 metros cuadrados construidos para la instalación de las parcelas de acampada, los apartamentos, un edificio destinado a servicios generales (en el que se instalarán dos comedores, un supermercado, una discoteca, una piscina cubierta, un gimnasio y un parque infantil), un edificio de recepción, edificios sanitarios, las pistas deportivas y los viales internos.
La empresa promotora trata de dar, ahora, un impulso al proyecto ante el creciente auge que la opción de los campamentos turísticos como destino vacacional alternativo tras el impacto de la crisis sanitaria del coronavirus. De ahí que se trate de cumplimentar las subsanaciones requeridas en el menor plazo posible. Esa tendencia es la que habría alumbrado otro proyecto similar, entre los términos municipales de Alicante y Busot, en este caso promovido por la empresa Estirpe Villas. Se trataría de un campamento turístico tipo resort de cinco estrellas, situado en la partida de Monnegre, en el que se prevé 190 bungalós y 200 parcelas. La propuesta permanece ahora en exposición pública para la obtención de una DIC.