ALICANTE. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante, el bipartito compuesto por PP y Cs, prevé presentar una declaración institucional para su debate en el pleno ordinario de abril, que se celebra este viernes, con el fin de instar al Consell a rebajar las medidas restrictivas para los sectores del ocio, turismo y hostelería. Fuentes municipales han concretado, a través de un comunicado, que en la iniciativa se exige al gobierno de Ximo Puig que el horario del toque de queda se retrase hasta las 22:30 horas, dado que el nuevo horario de cierre permitido a la hostelería está marcado media hora antes.
En la declaración institucional se añade la necesidad de ampliar el aforo del interior de los locales al 50 por ciento y la apertura de las barras de los negocios hosteleros cumpliendo con la distancia mínima de un 1,5 metros entre clientes. La vicealcaldesa de Alicante, Mari Carmen Sánchez, mantuvo este mes una reunión con los representantes del sector hostelero, ARA (Asociación Restaurantes Alicante), ALROA (Asociación de Locales de Restauración y Ocio de Alicante), APEHA (Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Alicante) y CEOH (Coordinadora Empresarial Ocio y Hostelería de la Comunidad Valenciana) para mostrar el apoyo a sus reivindicaciones.
Además, el sector hostelero exige en relación a lo anterior, que las políticas restrictivas vayan acompañadas de acciones propositivas con compensaciones directas por el cierre obligado. En este sentido, la propuesta de acuerdo reclama al Gobierno central un Plan Estratégico Nacional para el sector, al tiempo que solicita a la Consellería de Sanitat a habilitar el buffet asistido en los establecimientos hoteleros ante la previsión de alta ocupación. La también responsable, Sánchez, ha señalado que "no entendemos que teniendo los mejores índices de España, a la única mejora que hemos visto haya sido escasa. La hostelería está pagando los platos rotos de la pandemia y se ha demostrado que son seguros y cumplen con la normativa de seguridad, y además, no hay ningún informe científico que señale a la hostelería como un foco de transmisión".
Por otro lado, la vicealcaldesa ha denunciado que "no hay un plan estratégico nacional para el sector turístico, no hay compensaciones directas a unos empresarios que se ven obligados cerrar y por último hasta se pone en cuestión el modelo turístico de España, que sigue siendo el motor de nuestra economía". El comunicado incide en que tras las medidas adoptadas por el Consell en enero, en las que se decretó el cierre de la hostelería y posteriormente su apertura, primero hasta las 17 horas y, después, una hora más tarde, este sector ha acumulado más de 1.017 millones de euros de pérdidas, y hasta la fecha no hay un plan de ayudas económicas que puedan aliviar las deudas de los diferentes establecimientos. En este sentido, después de un año de confinamiento, cierres y toque de queda, estos negocios llevan acumulados unas mermas de entre 80.000 y 300.000 euros de media.
Así, las mismas fuentes insisten en que "los datos actuales epidemiológicos de la región son los más positivos, con una incidencia acumulada que está alrededor de 30 casos por cada 100.000 habitantes, y por ello, los hosteleros piden al Consell que les permitan flexibilizar su actividad. Además, este sector ha señalado en numerosas ocasiones no existe ningún informe científico que avale que las restricciones de la actividad mejoren los niveles de contagio".