ALICANTE. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante vuelve a coger la bandera de la reivindicación frente a lo que PP y Cs consideran un nuevo ejemplo de agravio respecto a la provincia de Alicante. En esta línea, el concejal de Transportes del Ayuntamiento de Alicante, Manuel Villar, considera que "el Gobierno central, en alianza con Ximo Puig, vuelve a despreciar y a olvidarse de los alicantinos al premiar al nacionalismo catalán con una inversión de más de 600 millones de euros para el soterramiento de las vías férreas de Barcelona, mientras aquí seguimos esperando que de una vez por todas se solucione la integración del ferrocarril en la ciudad", según ha señalado, a través de un comunicado.
Villar se refiere así al proyecto anunciado recientemente por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, consistente en la eliminación del trazado ferroviario en superficie en Montcada, incluyendo el soterramiento de la línea Barcelona-Portbou a su paso por el casco urbano mediante un túnel de cuatro kilómetros y la construcción de una nueva estación de viajeros, una obra que implica encima una inversión de 621 millones de euros.
En opinión del edil, "este faraónico proyecto anunciado por el Ministerio representa a la perfección lo que es el Gobierno de Pedro Sánchez: un ejecutivo obsequioso con el nacionalismo catalán, que recompensa la deslealtad y la traición, y margina al resto de los ciudadanos, especialmente a los alicantinos, que una y otra vez tienen que cómo se guardan en un cajón los proyectos de mejora, modernización y transformación de la ciudad, y todo para contentar a los nacionalistas y mantenerse a toda costa en el poder. Se recompensa a los independentistas en detrimento de Alicante con un proyecto similar al que se niega a Alicante y que encima cuesta más de 600 millones de euros".
Villar recuerda que "Alicante ya es la provincia que menos inversión va a recibir en 2023 en los Presupuestos Generales del Estado, y ahora, nos enteramos de que el independentismo catalán no sólo consigue que se le perdonen delitos tan graves como una sedición, o que incluso se elimine este delito del Código Penal y se proponga la reforma del de malversación, sino que también consigue inversiones millonarias en detrimento de otras regiones y ciudades, como es el caso de Alicante, que sigue aguardando que el Gobierno del PSOE dé una solución al soterramiento de las vías de tren a su llegada a Alicante".
A juicio del concejal de Transportes, "está claro que Alicante no está entre sus prioridades, que pasan por contentar al nacionalismo catalán y castigar a los alicantinos. Ya sabemos", agrega, "lo que es Sánchez, cuyo cómplice es Puig: 621 millones de euros para Barcelona, y ni las migajas para el soterramiento de las vías férreas en Alicante, por no hablar del enésimo agravio y ninguneo a esta ciudad con la sede de la Agencia Española de Supervisión de la Inteligencia Artificial".
El edil alicantino sostiene que "Alicante necesita, y lo necesita ya, que Puig se deje de excusas, y deje de callar y guardar silencio ante un nuevo agravio con la ciudad. Puig piensa y se preocupa más por Sánchez y su Gobierno que por los alicantinos; se preocupa más por tener contento al nacionalismo catalán que por trabajar en el futuro y el desarrollo de nuestra ciudad". En este sentido, Villar mantiene que Puig que debe aliarse con Alicante, "y no con Sánchez o los independentistas catalanes para reclamar y conseguir no sólo la desaparición total de las vías férreas en superficie en los accesos a la ciudad, sino también que la variante de Torrellano y la conexión de la ciudad con el aeropuerto sean una realidad, algo que por ahora es impensable por las hipotecas de Sánchez con los nacionalistas y el silencio y la inacción de Puig".
A este respecto, el concejal de Transportes insiste en que "estamos ante proyectos clave para el futuro de la ciudad. Necesitamos, por ejemplo, que se elimine el paso de las vías por el frente litoral, entre San Gabriel y Aguamarga, que es una justa e histórica demanda de los vecinos de estos barrios, pero ni el Gobierno ni la Generalitat, ni Sánchez ni Puig, han atendido su petición. Ellos, sólo atienden las reivindicaciones de los nacionalistas. Para el independentismo catalán sí hay dinero; para los alicantinos, no. Y ante ello, el tripartito de Puig y sus socios callan y obedecen ante este nuevo agravio hacia los alicantinos".