BENIDORM (EFE). El Balonmano Benidorm visita este miércoles la pista del Barça (17 horas) sin complejos y con la intención de complicarle la vida al líder, tal y como ya sucedió en la primera vuelta.
En aquel partido, el equipo de Fernando Latorre dominó el marcador durante muchos minutos y tuvo posesión para igualar el resultado en los últimos segundos, pero erró su ataque (25-26).
El Benidorm llega al Palau, donde nunca ha podido puntuar ni competir, en cuarta posición en la clasificación y en racha triunfal, ya que ha enlazado cuatro victorias consecutivas que le han permitido presentar su candidatura a pelear por una plaza europea la próxima temporada.
Latorre no podrá contar, una semana más, con el extremo Jose Mario Carrillo, baja por problemas físicos, mientras que Iker Serrano y Pepe Oliver son dudas al acusar molestias.
El técnico alicantino calificó el partido ante el Barça de “complicado por no decir imposible” y lamentó contar con varios jugadores “tocados o muy castigados físicamente”.
Latorre anunció que dosificará esfuerzos y repartirá minutos entre los “menos habituales y los más jóvenes” para tener “entre algodones” a los jugadores con molestias para que puedan llegar en plenitud al tramo final de la competición, en el que el Benidorm se jugará sus opciones europeas.
“Es una oportunidad para seguir probando cosas de cara al futuro”, añadió el preparador del Benidorm.