BENIDORM (EFE). El Balonmano Benidorm debuta en la Copa del Rey ante el Amenabar Zarautz (20 horas) en una eliminatoria a partido único en la pista del conjunto vasco entre dos equipos que mantienen una sana rivalidad deportiva.
Ambos conjuntos coincidieron en 2014 como rivales en la semifinal de la fase de ascenso a la Liga Asobal y en aquel partido venció el Benidorm, que posteriormente lograría subir tras vencer en la final a la máxima categoría.
La afición vasca y sus jugadores, pese a la eliminación, mostraron su apoyo al Benidorm en el partido decisivo y desde entonces se creó un vínculo entre ambas entidades que ha provocado que se enfrenten en partidos de pretemporada.
Además, el Benidorm incorporó el pasado año a su plantilla Ander Torrico, uno de los jugadores más prometedores del conjunto guipuzcoano, quien no oculta que el partido es "especial".
"Será un partido bonito, pero también muy complicado porque ellos en casa rinden el triple. Si no estamos al 200% lo pasaremos mal", explicó el jugador.
Más allá de los sentimentalismos, el Benidorm pondrá los cinco sentidos en superar la eliminatoria para seguir con esperanzas de disputar, por vez primera en su historia, la fase final de la Copa del Rey.
Zupo Equisoain, entrenador del equipo, calificó el encuentro como "importante y peligroso" y afirmó que el Benidorm deberá jugar "muy serio" si quiere pasar de ronda.
"Cuando juegas con un equipo inferior la tendencia es a relajarte, pero el Amanabar Zarautz lo que tiene es que pelea y lucha los 60 minutos, por lo que tienes que estar al 100%", explicó el preparador navarro.
Equisoain no podrá contar para este partido con el extremo David Cuartero, ni con sus dos centrales, el argentino Pablo Simonet y el cubano, Noelvis Robles, lesionados. El técnico deberá improvisar de nuevo con Corzo o Torrico como directores de juego.