BENIDORM (EFE). El Balonmano Benidorm visita este miércoles (20:30 horas) la pista del Bada Huesca, en uno de los cuatro partidos que tiene aplazados, con el reto de aprovechar su dinámica positiva y vencer en una pista que no se le ha dado bien históricamente, ya que en sus seis anteriores visitas solo ha sido capaz de ganar en una ocasión.
Este encuentro fue aplazado en su momento por los seis falsos positivos que fueron detectados en la plantilla del Benidorm a su llegada a Huesca, lo que provocó el consiguiente confinamiento y su eliminación de la competición europea.
El equipo de Fernando Latorre, aunque con un parón de casi un mes por el medio, ha logrado encadenar cuatro partidos consecutivos sin perder, tres de Liga y uno de competición europea, y llega a Huesca tras vencer el pasado sábado al Guadalajara.
El conjunto oscense cuenta con solo dos puntos, por lo que en el caso de que el Benidorm logre vencer alejaría a un rival directo y ampliará las distancias con la zona de descenso.
El técnico cuenta con las dudas de Jorge Pabán, con molestias en la espalda, y de Adrián Nolasco, con una lesión en el hombro.
Latorre, que pronostica un partido complicado, confía en que su equipo vaya recuperando el pulso y las sensaciones en la competición tras varias interrupciones y pueda “estar en partido” hasta el último momento.
"Es un equipo que defiende muy bien, con una grandísima portería y que corre mucho", dijo Latorre, quien reconoce que el triunfo de la pasada jornada ha sido "balsámico".
