BENIDORM (EFE). El Balonmano Benidorm está pendiente del posible aplazamiento del partido, que este sábado debía disputar en Nava tras la suspensión en la jornada de ayer por motivos sanitarios del encuentro entre el equipo segoviano y el Huesca.
Si así fuera, este se convertiría en el cuarto aplazamiento de un encuentro del club alicantino en la presente temporada.
El club benidormense aguarda los resultados de las pruebas a las que se van a someter en la jornada de hoy los jugadores del Nava ante la posibilidad de que existan casos positivos en su plantilla por coronavirus.
“No sabemos si vamos a jugar. Está siendo una temporada muy extraña y rara. Es muy complicado mantener la concentración en los entrenamientos y tener al grupo concentrado, porque cuando no te pasa algo a ti le pasa a los demás”, comentó a Efe Fernando Latorre, técnico del Benidorm.
El Benidorm solo ha disputado tres partidos de la Ligas Asobal y tiene pendientes los duelos ante Granollers, Logroño y Huesca, además de haberquedar eliminado en la EHF por no poder presentarse a su partido en Viena al estar en cuarentena por falsos positivos.
