BENIDORM (EFE). El Balonmano Benidorm visita este sábado la pista del Incarlopsa Cuenca (16 horas) en busca de una victoria que le permita instalarse en la zona media de la tabla en un partido marcado por el reencuentro con el argentino Pablo Simonet.
El lateral argentino fue pieza clave del conjunto benidormense durante cuatro temporadas y uno de los grandes héroes de la historia de la entidad al lograr el tanto que clasificó al equipo para la final de la Copa del Rey y competición europea.
Los encuentros entre Cuenca y Benidorm, dos equipos que mantienen una gran rivalidad en la pista, siempre son especiales, en parte por la cantidad de jugadores que han compartido equipo, como en el caso del portero brasileño, Leo Tercariol.
El entrenador del Benidorm, Fernando Latorre, no podrá contar para este partido por segunda semana consecutiva con el pivote Gonzalo Porras, baja por motivos personales, ni con los lesionados Ángel Rivero y Adrián Nolasco.
La gran novedad será la presencia, de nuevo, del pivote portugués José Da Costa, quien a pesar de anunciar su marcha de la plantilla por motivos personales el pasado noviembre mantiene ficha con el club.
El jugador luso volverá a echar una mano a su equipo en la pista a pesar de no haber entrenado con sus compañeros durante gran parte de la semana.
Latorre pronostica un partido "igualado" y una "batalla deportiva" entre Cuenca y Benidorm, dos equipos que recordó mantienen "una gran rivalidad".
El técnico afirmó que la pista conquense es de las "más complicadas", si bien confió en que la limitación de aforo dé una pequeña ventaja al Benidorm.
"La Liga está rara y se ve un balonmano más puro, de salón. Esta temporada el factor de jugar en casa no es tan importante", explicó el técnico alicantino.
El partido tiene cierto aire de revancha para el conjunto serrano, ya que el Benidorm dejó sin la final de la Copa y competición europea al Cuenca la pasada temporada con un gol en el último segundo anotado precisamente por Pablo Simonet.