ALICANTE. La idea del espacio ha generado gran incertidumbre desde el comienzo del pensamiento. Desde la filosofía hasta la física, pasando por otras disciplinas como la danza, la psicología o el teatro, muchas han sido las personas que se han cuestionado acerca de esta dimensión y han intentado ofrecer una respuesta a su modo de entenderla. Tan grande es su repercusión que el filósofo y psicólogo francés Michel Foucault anunció en una conferencia dictada en París que si la gran obsesión que había existido en el siglo XIX fue la historia, en el período actual sería la del espacio.
"Estamos en la época de lo simultáneo, de la yuxtaposición, de lo próximo y lo lejano, de lo uno al lado del otro, de lo disperso", afirmaba Foucault. Pero el espacio y el arte son conceptos que históricamente han estado ligados y es en esta materia en la que surgen manifestaciones de lo más variadas. En esta ocasión, una nueva reflexión sobre el espacio se encuentra ubicada en el Museo de la Universidad de Alicante (MUA) en forma de exposición pictórica. La muestra, titulada El espacio construido, se inauguró este viernes en la Sala El Club del MUA, donde estuvo presente el autor de las obras, Jesús Zuazo, junto con el comisario de la exposición, Juan Antonio Roche.
En esta muestra, Jesús Zuazo ha intentado representar el espacio a su modo de entenderlo, aclarando que "se trata de un concepto, algo que se construye, que viene dado y que el ser humano puede modificar". El alicantino, quien ha expresado su desagrado a calificarse como artista, realiza a su vez un recorrido por sus 30 años de carrera, rindiendo así un pequeño homenaje a las tres décadas que le respaldan como creador de producción pictórica, desde 1989 hasta 2019. El MUA es el primer y, de momento, único lugar en el que se exponen las 48 obras que componen esta reflexión sobre el espacio, entre las que encontramos dos esculturas dentro de la predominancia del formato de la pintura. "Todas las piezas están interconectadas y una es el resultado de otra anterior", comenta el autor, por lo que la colección constituye un todo, un organismo completo que se debe apreciar de forma colectiva. "Aunque pueda pensar que alguna ha quedado más bonita, no le doy importancia porque contemplo la obra en su conjunto", declara.
La colección está planteada de manera cronológica, con una división en cuatro partes conectadas entre ellas a través del concepto común del espacio y su construcción: Primera figuración. 1989-1994; Segunda figuración. 1995-1999; Primera abstracción. 2000-2005; y Segunda abstracción. 2006-2018. Zuazo añade que, cuando decidió iniciarse en el arte abstracto, lo hizo para empezar a experimentar con él, comenzando como un neonato en este terreno. Y puntualiza que la idea de El espacio construido no surgió desde el principio, sino que fue a lo largo del proceso artístico cuando encontró la representación que deseaba plasmar con todo aquello con lo que contaba, "con las obras que estaba pintando y con las herramientas de las que disponía", explica.
El autor detalla que empezó a preparar esta exposición meses atrás, en la que recopila una colección de sus trabajos a lo largo de sus tres décadas como pintor. La muestra, que está comisariada por el profesor universitario Juan Antonio Roche, se podrá visitar hasta el 7 de abril, "en un lugar que constituye un núcleo importante para la divulgación cultural por su cercanía con el alumnado de la Universidad -afirma Zuazo-, para acercar el arte y la cultura a los estudiantes".