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El alto mando ‘alicantino’ de Mazón

Palau de la Generalitat. El presidente del Gobierno valenciano, Carlos Mazón, se rodea de un seleccionado grupo de personas. Se trata de su núcleo duro, aquel que participa de la toma de decisiones del día a día del Ejecutivo, pero también del partido, tras acompañarle en su aterrizaje como líder del PP en la Comunitat Valenciana

| 16/10/2023 | 13 min, 28 seg

VALÈNCIA. Algunos de sus más leales han llevado una trayectoria paralela a la suya. A otros los ha incorporado a su equipo cercano de manera más reciente. Lo que la mayoría tiene en común es la procedencia. Aquello que ya se empieza a conocer como ‘el poder alicantino’. 

Todos han trabajado con él durante los últimos años en la Diputación de Alicante que ha dirigido. Pero no solo parece que se quiera tildar así el origen, sino la manera de hacer política. La marca. «Somos alicantinos; os vamos a sorprender», comenta alguno en tono de chanza, cuando en privado es interpelado por los hitos estratégicos hasta el momento, como mantener a cargos del gobierno de izquierdas anterior o como lograr arrebatar la Diputación de Valencia al PSPV. 

Se consideran flexibles a la hora de pactar y, por qué no, habilidosos para alcanzar acuerdos, porque vienen de gobernar en la corporación provincial en minoría. Mazón ha destacado, en multitud de ocasiones, que llegaba a pactar los presupuestos anuales con Compromís. Algo que quiere trasladar ahora a la política autonómica en otros grandes temas. 

El equipo del jefe del Consell asegura que poco mira a las familias internas del PPCV. De ahí la selección de perfiles tanto para el Ejecutivo como para Les Corts. Y lo cierto es que son muchas voces en el PPCV las que opinan que, efectivamente, las corrientes dentro del partido se han diluido, tanto en la confección de las candidaturas electorales como para los cargos del Gobierno. 

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Cristianos, liberales, ala conservadora... normalmente, listas y nombramientos han traído consigo un tradicional reparto de cuotas, basado en la influencia para mantener el equilibrio interno que, con el paso del tiempo, ha pasado a ser menor. Aunque es obvio que quedan cargos de la formación procedentes de las denominadas 'familias', las incorporaciones han dejado de ser un reflejo estricto de ellas. 

Resulta obvio que no se puede eludir entre los repescados el protagonismo de la era de Eduardo Zaplana, de la que procede el propio Mazón, aunque son numerosos los cargos públicos que han ocupado responsabilidades con otros gobiernos, como el de Francisco Camps y Alberto Fabra. A lo que se añade que el jefe del Consell ha logrado fidelizar a ciertos sectores e, incluso, rehabilitado en la política a otros, como es el caso del equipo de la fallecida exalcaldesa de València Rita Barberá

El actual ‘búnker’ del Palau tiende a la discreción. Poco se han filtrado los nombramientos del Consell y, los de la mayoría de los titulares de los departamentos únicamente circularon pocas horas antes. Mazón controla la información en primera persona para que no haya fugas. 

La forma de trabajo y de organización diaria puede tener ciertas similitudes con las del anterior presidente de la Generalitat, Ximo Puig, pero no es un calco. Por ejemplo, no existe una reunión fijada los lunes para abordar la semana, sino que las conversaciones son constantes y fluidas. El núcleo duro tiende más a reunirse en otros momentos. Por ejemplo, en comidas que se alargan y pueden durar toda una tarde. 

El presidente de la Generalitat tiene ojos en todas partes. En el Consell, en Les Corts y en el partido. Su núcleo duro más reducido lo conforman cuatro: Santiago Lumbreras, José Manuel Cuenca, Cayetano García y Juan Francisco Pérez Llorca. El ampliado, unos pocos más. En total, menos de una decena de personas de su máxima confianza, ubicadas en los lugares clave para que nada se le escape, para desarrollar su hoja de ruta, para apagar incendios, para trazar estrategia y, cómo no, para consultar y dejarse aconsejar en los asuntos fundamentales.

Unidos por la Cámara de Alicante

Santiago Lumbreras y Carlos Mazón compartieron nueve años en la Cámara de Comercio de Alicante cuando el segundo se apartó de la política. El ahora presidente de la Generalitat fue líder de Nuevas Generaciones en los noventa y, en 1999, fue nombrado director general del Instituto Valenciano de la Juventud (IVAJ). En 2003, con la llegada de Camps, fue designado director general de Comercio y Consumo. En 2005, pasó a ser director general de Seguridad Industrial hasta 2007.

En aquella nueva legislatura fue concejal del municipio de Catral y diputado provincial, hasta que abandonó los cargos en 2009, cuando el entonces presidente de la Cámara de Comercio de Alicante, José Enrique Garrigós, lo fichó como director gerente. Dos años más tarde se incorporó Santiago Lumbreras como jefe de gabinete y comunicación de la entidad cameral. Ambos se conocían de antes, aunque apuntalaron la relación en esa época.

Lumbreras fue nombrado, en 1995, jefe de Informativos de Ràdio 9, donde fue señalado por las famosas listas negras. Tras su salida, recaló en el diario La Prensa de Alicante, del que fue subdirector. Luego pasó a ser jefe de prensa de la Generalitat en la dirección territorial de Alicante, hasta llegar a la oficina de comunicación de Terra Mítica. 

Su camino se unió al de Mazón en 2010, en la Cámara de Comercio. Y siguió en 2019, cuando este regresó a la Diputación como presidente. Lumbreras fue su jefe de gabinete y lo acompañó en todo el proceso de aterrizaje en València cuando comenzó a coger las riendas del PP a nivel autonómico. Ahora es secretario autonómico de Relaciones Institucionales y Transparencia de la Generalitat.

Vecinos de San Juan

Lumbreras trabaja actualmente codo con codo con José Manuel Cuenca. Este periodista, nacido en Ibi, ha desarrollado toda su trayectoria profesional en la Cadena Cope hasta 2016, cuando dejó la dirección de la emisora en Murcia. Allí había ejercido desde 2011. Con anterioridad, fue director de Cope Alicante y Cope Dénia y responsable de la sección de Deportes en 1996. Su relación con Mazón viene desde su etapa al frente de la emisora de Alicante, aunque también son vecinos en la playa de San Juan, al parecer el nuevo lugar de influencia del Consell. Además, ambos comparten aficiones como el running y suelen practicarlo juntos. 

Tras la salida de Cope Murcia, Cuenca asumió la dirección de Relaciones Institucionales del grupo STV, de Murcia, dedicado a la gestión de servicios. Pese a que la firma es de Murcia, Cuenca tenía su despacho en Alicante, y siguió manteniendo relación con el presidente de la Generalitat. 

Inicialmente, una vez Mazón fue proclamado líder del PPCV y comenzó a conformar su equipo como candidato a la Generalitat, incorporó al exlíder de los populares de Cataluña, Daniel Sirera, como director de Gabinete y Estrategias. Casi un año después, dejó el cargo para ser candidato a la alcaldía de Barcelona. Su relevo fue José Manuel Cuenca, actual secretario autonómico del Gabinete del President y Comunicación. 

Persona de la máxima confianza del jefe del Consell, diseña la estrategia comunicativa. Función de la que también participa Maite Gómez como directora general de la oficina de prensa de la Presidencia. Se trata de una profesional con una trayectoria destacada y reconocida durante los años de gobierno del PP, en la que destaca su puesto de responsable de prensa de la Conselleria de Economía, Hacienda y Empleo que dirigió Gerardo Camps y en la que permaneció durante nueve años. En la última legislatura de gobierno popular, con Alberto Fabra como presidente, ejerció de asesora de asuntos parlamentarios y, finalmente, como asesora de Comunicación en el Palau de la Generalitat.

'El cerebrito'

A ellos se une Cayetano García, el miembro más joven del equipo de Mazón (tiene poco más de treinta años). Es secretario de ayuntamiento. Ha estado en el de Alcalà de Xivert-Alcossebre (Castellón) y en el de Paiporta (Valencia). El entorno del presidente de la Generalitat lo califica como el 'cerebrito', y señalan que su perfil despuntaba. Por su experiencia, tiene un amplio conocimiento de legislación administrativa, el campo en el que más destaca, y, también, asiste al jefe del Consell en tareas de argumentario político. 

Es hijo de Herminio García, ya fallecido, quien estuvo en el gabinete del exconseller Rafael Blasco y ocupó diversos altos cargos en la Conselleria de Educación, primero en la etapa de Eduardo Zaplana y después en la de Francisco Camps. Allí coincidió con el actual titular de Educación —y persona muy próxima a Mazón—, José Antonio Rovira. Ambos fueron muy cercanos. 

El estratega

Fuera del Palau en lo físico, aunque en la primera línea de la toma de decisiones a todos los niveles y con gran influencia política, se encuentra el hombre fuerte de Mazón en el partido: Juan Francisco Pérez Llorca. A diferencia de José Manuel Cuenca, Santiago Lumbreras y José Antonio Rovira, el líder del PPCV y su ahora número dos en la formación no eran amigos hasta hace poco. A Pérez Llorca se le situaba en la órbita de José Císcar y con buena relación con Isabel Bonig. Alcalde de Finestrat, accedió en 2019 al cargo de diputado provincial por cuota ciscarista, pero siempre cumplió órdenes fielmente. 

A mitad de mandato tuvo que dejar el escaño en la corporación provincial de Alicante para dar entrada a otro concejal de Benidorm, por lo que pasó a la Federación Valenciana de Municipios y Provincias como asesor y, más tarde, como avanzadilla para conocer los otros PP, de Valencia y Castellón, por si Mazón asumía más responsabilidades. Así ocurrió, en el verano de 2021. Y el líder de los populares lo colocó a su derecha. Aunque hasta 2019 había ejercido fundamentalmente en la comarca de La Marina Baixa, el propio Mazón lo nombró coordinador general, como número dos de Toni Pérez, entonces secretario general en el PP provincial de Alicante.

Desde aquel puesto sofocó algún incendio político, como el de la vacunación VIP del alcalde de La Nucía y diputado provincial de Deportes, Bernabé Cano, al que Pérez Llorca tuvo que convencer para que renunciara a sus competencias, ante las exigencias de Ciudadanos, que pedía su cabeza. A ello se sumó que el PP recuperó la alcaldía de Teulada-Moraira, gracias a una moción de censura contra la alcaldesa de Compromís, que fue apoyada por dos ediles socialistas tránsfugas.

Pérez Llorca también tuvo un papel preponderante en los contactos con la dirección nacional de Alberto Núñez Feijóo cuando se produjo la destitución de Pablo Casado y Teodoro García Egea. Mazón había sido ungido por los segundos, por lo que resultaba fundamental naturalizar las nuevas relaciones, y que no se viera al líder del PPCV como un heredero de la antigua dirección, sino como un barón emergente. 

Lo orgánico se le daba bien. Una posición desde la que tampoco ha tenido gran exposición pública —algo que él prefiere—. Y desde su llegada a València junto a Mazón ha despuntado en estrategia e incluso ha sorprendido tanto dentro del partido como en las formaciones de la oposición. Dos han sido los logros más destacados: su labor clave en la jugada para que Compromís entrara en la Mesa de les Corts -—con la consiguiente pérdida del puesto para el PSPV— y que la Diputación de Valencia haya acabado en manos de los populares.

El secretario general del PPCV es los ojos de Mazón en el partido, aunque también en Les Corts, donde es portavoz adjunto. Si bien el 'rostro' del partido en el Parlamento autonómico no es él, sino Miguel Barrachina como portavoz, encargado del argumentario y de los posicionamientos desde la exposición pública. 

Una amistad de muchos años

Si hay que mencionar a un conseller de la máxima confianza de Mazón ese es José Antonio Rovira, titular de Educación, con quien mantiene una amistad de bastantes años (las familias de ambos se conocían). 

Entre otros cargos públicos además de diputado, fue director general de Personal de la Conselleria de Educación, entre 2001 y 2007 —nombrado por Eduardo Zaplana, aunque luego permaneció con Francisco Camps al principio—, y más tarde director territorial de Alicante, entre 2013 y 2014 —ya con Alberto Fabra—. 

Referentes femeninos

El presidente de la Generalitat también cuenta con referentes femeninos, y en este punto es necesario mencionar a Susana Camarero y Macarena Montesinos. La primera cuenta con una dilatada trayectoria política, que comenzó de la mano de Eduardo Zaplana, al igual que Mazón, por lo que ambos provienen de la misma familia del PP. Fue secretaria de estado de Servicios Sociales e Igualdad, entre 2014 y 2016 -—durante el gobierno de Mariano Rajoy— y ha sido diputada en Les Corts y el Congreso. Abogada y experta en Igualdad, momentáneamente ha vivido apartada de la primera línea.

Ahora, su figura resulta clave en el nuevo Ejecutivo. No se trata únicamente de la vicepresidenta segunda y consellera de Servicios Sociales, igualdad y Vivienda, sino de la persona que ejercerá junto a Mazón el control político y la coordinación de todo lo que ocurra dentro del Ejecutivo. Camarero adquiere un papel especialmente relevante en un gobierno compartido con Vox. 

Montesinos, por su parte, es la madrina política del presidente de la Generalitat y, aunque no está en el día a día de la toma de decisiones —es diputada nacional—, se trata de una persona con la que Mazón habla asiduamente. Además, ha sabido mantener buena relación con las direcciones nacionales del PP —en este momento así es con la de Feijóo—. Sonó como mujer fuerte en el Consell, pero al parecer su preferencia era continuar en el Congreso. 

Cuando se pregunta en el entorno del presidente de la Generalitat sobre perfiles con elevado grado de influencia política, surge el nombre de María José Catalá. La alcaldesa de València fue en quien Mazón se apoyó cuando recaló en la ciudad. Un tándem llamativo cuya sintonía real, más allá de la alianza política, siempre se ha cuestionado. Sin embargo, son diversas las personas que se esfuerzan en remarcar que ambos hablan diariamente, y que el jefe del Consell le hace partícipe de consultas y decisiones.  

* Este artículo se publicó originalmente en el número 108 (octubre 2023) de la revista Plaza

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