La directora del aeropuerto, Laura Navarro, en la terminal de salidas de El Altet. Fotos: RAFA MOLINAALICANTE. El aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández, en la pedanía ilicitana de El Altet, empieza a cerrar la 'brecha covid', más acusada en su caso que en el de otras terminales de la red de Aena por el enorme peso que los pasajeros internacionales han tenido históricamente en su tráfico. Tras el desplome de 2020 y un tímido inicio de recuperación en 2021, un ejercicio (muy marcado aún por la pandemia hasta el verano) en el que El Altet recuperó solo el 40% del tráfico de 2019, la terminal alicantina empieza a moverse en cifras aún no prepandemia, pero sí cercanas a los años de su eclosión a partir de 2015.
Así lo constatan las cifras de pasajeros del primer trimestre de 2022, en el que el aeropuerto Miguel Hernández ha visto pasar por sus instalaciones a un total de 1,88 millones de pasajeros, o lo que es lo mismo, cerca del 75% del tráfico de viajeros que registró la terminal en el mismo periodo de 2019, su mejor año histórico. Y la tendencia se acentúa, pues en el mes de marzo se alcanzaron los 830.474 pasajeros, lo que supone recuperar más del 83% del tráfico del mismo mes de 2019, según las cifras oficiales de Aena.
Pero lo mejor de 2022 está por venir, o al menos así lo apuntan las previsiones que maneja la terminal que dirige Laura Navarro para la temporada de verano, que comenzó oficialmente el domingo 27 de marzo. Durante los siete meses que dura la temporada (del último domingo de marzo al último domingo de octubre) las aerolíneas han programado en el aeropuerto Alicante-Elche nada menos que 12 millones de asientos, lo que supone un 2,2% más que en la misma temporada de 2019 (cuando El Altet marcó su récord). Que esos asientos estén disponibles no significa que todos se vayan a llenar, pero es un síntoma de que el verano de 2022 se prefigura como el de la recuperación.
El dato es más significativo aún si se tiene en cuenta que de esta programación ya no forman parte (al menos, por el momento, a la espera de ver cómo finaliza el conflicto y sus consecuencias) los vuelos que en 2019 unían Alicante con Rusia y Ucrania. Estas conexiones suponían alrededor del 2% de la oferta, de forma que el crecimiento es en realidad de cuatro puntos. En total, las compañías prevén realizar 67.000 operaciones comerciales, un ligero descenso del 0,2% con respeto a la temporada de verano de 2019.
Por zonas, Europa sigue siendo el área con más plazas ofertadas para la temporada estival, más de 10 millones de plazas (lo que supone un 2% menos que en 2019). España cuenta con más de 1.690.000 asientos, lo que supone crecer un 29% respecto a 2019. Y África, el destino emisor más interesante, registra más de 336.000 plazas ofertadas (+14% respecto a 2019). Por países, además del notable incremento de España, los países que más crecen son: Noruega, con más de 752.000 plazas y un incremento del 20%, Bélgica con más de 723.000 plazas y un aumento del 26% e Italia con más de 344.000 plazas y una subida del 37%.
En cuanto a la conectividad y comparando con la temporada de verano 2019, el aeropuerto alicantino conecta con 26 países distintos, al igual que antes de la pandemia, y mantiene enlaces con 122 destinos (4 más que en 2019) a través de 207 rutas (7 más que en 2019). Si bien los datos generales para esta temporada de verano 2022 son positivos, el grado de incertidumbre sigue siendo elevado debido a factores como la evolución de la pandemia, el conflicto de Ucrania o la subida del precio del combustible. Hay que tener en cuenta, en este sentido, que la programación de asientos y movimientos está siempre sujeta a cambios por parte de las aerolíneas, pero en principio las sensaciones son muy positivas.
