ELCHE. El Salón de Plenos ha mostrado, esta misma tarde, la mejor de sus galas en el acto que conmemora la jornada en la que los españoles decidieron enterrar viejos fantasmas y decidir el futuro de una manera valiente y pacífica, en la cual el diálogo permitió desarrollar el marco jurídico elemental que garantiza los derechos y las libertades democráticas de nuestra colectividad. El 6 de diciembre de 1978 se celebró el referéndum para la ratificación de la Constitución, fruto de la Ley para la Reforma Política, siendo los primeros comicios a los que estaban convocados los ciudadanos tras el franquismo, y que contó con el respaldo unánime del censo electoral.
Más de cuatro décadas después, el regidor ilicitano, Carlos González, en un evento que ha contado con la presencia del Equipo de Gobierno, miembros de la Corporación Municipal, personalidades destacadas de todos los ámbitos de la sociedad y vecinos que aún recuerdan con cariño la efeméride, ha hecho un claro llamamiento a recuperar el espíritu de consenso que permitió alumbrar la Carta Magna, reivindicando su renovación para adaptarla al siglo XXI dada la evolución y madurez del pueblo español.
En dicho sentido, según ha afirmado González, “siete de cada diez ciudadanos piensa que la Constitución necesita una profunda reforma”, y se ha pronunciado en lo positivo que sería la misma para afrontar la multiplicidad de retos de la presente centuria, además de otras cuestiones más cercanas en el tiempo como la resolución de la crisis de convivencia en Cataluña, el blindaje de derechos ante el peligroso avance de los populismos, o que sea el elemento imprescindible que permita la estabilidad política y así evitar situaciones de bloqueo institucional como los vividos recientemente. “Es preciso que la reforma nazca de la concordia y el entendimiento”, y ha lamentado que, con la aritmética parlamentaria actual, sea imposible tan necesario propósito.
El alcalde, quien ha afirmado que la Constitución de 1978 trajo a España un modelo de construcción nacional “moderno, plural, abierto y europeista”, ha alabado a los actores políticos del momento por “la generosidad, altura de miras y visión de Estado” que demostraron, posibilitando que estos 41 años hayan sido “el mayor periodo de bienestar en España”.
La invitada a ofrecer la conferencia durante el acto, la consellera de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital, la ingeniera ilicitana Carolina Pascual Villalobos, ha sido distinguida con el Ram d’Or d’Elx por la Junta de Gobierno Local en atención a sus sobresalientes méritos profesionales, entre los que se encuentra la docencia e investigación universitaria y el decanato del Colegio Oficial de Ingenieros de Telecomunicaciones, “donde ha sido la primera mujer que ha alcanzado dichas responsabilidades en la Comunitat y en España”, ha especificado González.
Pascual, en su discurso, ha agradecido la mención honorífica y ha hablado de las políticas de innovación como la oportunidad perfecta para erigir una sociedad más igualitaria. “El buen uso de las nuevas tecnologías será una herramienta eficaz para combatir las distintas brechas existentes”, las cuales, ha subrayado, “servirán para mejorar la calidad de vida de las personas”, por lo que ha manifestado que, los avances en la técnica, “deben contribuir a garantizar los valores que recoge nuestra Constitución: derecho a la igualdad, al trabajo, a la producción y creación científica, a la protección a la infancia y de nuestros mayores”.
“Si conseguimos garantizar los derechos que la sociedad digital plantea, crearemos sociedades dotadas de potencial innovador y más inclusivas. Desde las administraciones, en cooperación con el sector privado y la sociedad civil, debemos garantizar una transformación digital sostenible en la que nadie quede atrás, en la que todos sean iguales, tal como recoge nuestra Constitución. Innovar supone pensar las cosas desde otro punto de vista y transformar la realidad para mejorarla. Suele ser un trabajo colectivo y necesita colaboración de todos. La Constitución fue una innovación, un cambio disruptivo, transformó la realidad y se hizo gracias al consenso”, ha señalado la consellera.
Asimismo, se ha otorgado cuatro de las más altas distinciones de la ciudad, la Medalla de Plata del Bimil·lenari, a la Asociación de Informadores de Elche, a Marina Marroquí Esclapéz, a la Plataforma de Teatro Amateur y a la Asociación de Amigos del Arroz con Costra.
La Asociación de Informadores de Elche, constituida en 1971 como heredera directa de la Asociación de la Prensa Ilicitana, vela por, en palabras del alcalde, “la “libertad de expresión y la calidad de nuestra democracia”.
Marina Marroquí, presidenta de la Asociación Ilicitana contra la Violencia de Género, ha recogido su galardón por la labor de sensibilización que efectúa “utilizando la educación como arma definitiva para acabar con este drama”.
La Plataforma de Teatro Amateur, ha precisado González, merece el reconocimiento “por la gran contribución de dinamización cultural en Elche durante dos décadas”.
La Asociación de Amigos del Arroz con Costra, por su contribución a la difusión de las tradiciones y la cultura ilicitanas y de los valores de la convivencia, el entendimiento y el diálogo entre los ilicitanos.