BENIDORM. El candidato por Vox para la alcaldía de Benidorm, David Pérez Brígido, fue condenado el pasado mes de febrero por violencia de género. Una sentencia firme de dos años de cárcel de la que se ha librado por no tener antecedentes penales, tal y como ha informado eldiario.es este viernes. Toda condena de prisión lleva aparejada una inhabilitación por sufragio pasivo durante ese periodo de condena, por lo tanto, de confirmarse estaría imposibilitado de presentarse a las elecciones municipales. También está privado a la tenencia de armas durante 3 años; a la prohibición de aproximarse a la exmujer a un distancia inferior a 300 metros durante un periodo de cinco años; a la prohibición de comunicarse con ella a través de cualquier canal durante cinco años, y, además, fue condenado abonar 4.000 euros a su exmujer.
El candidato también tiene una orden de alejamiento de cinco años por la que no puede acercarse a su expareja a menos de 300 metros.
Según ha trascendido por este diario nacional, los hechos se produjeron en la localidad de Noain, cerca de Pamplona, donde vivía con la víctima, a la que tal y como pone en la sentencia, sufrió "un maltrato habitual". La sentencia fime prueba "puñetazos en la cara y agarrones de cuello" a su exmujer a quien profería insultos tipo “mora de mierda” y amenazas de muerte.
Se da la circunstancia de que las pugnas en el seno de Vox de Benidorm fueron el desencadenante de que la dirección nacional relevara a la dirección provincial y nombrara a una gestora, ahora liderada por Ana Vega, candidata a las Cortes Valencianas. Pérez Brigido fue impuesto como coordinador local y después como candidato en sustitución del que era el coordinador local Alberto José Inés Moro por supuestas "irregularidades empresariales. El relevo de la dirección supuso la destitución de la entonces, Ana María Cerdán, que finalmente ha sido recuperada para la lista autonómica, como número cuatro, y como candidata a la Alcaldía de Villena.