ALICANTE. El alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, asume la propuesta y se convocará la comisión de seguimiento del pacto de Gobierno solicitada por sus socios de Guanyar y Compromís, este martes, después de que no se les tuviese en cuenta a la hora de acordar el nombramiento de los asesores de Comercio y Fiestas como directores generales. Pese a que la cita se preveía cerrar para esta misma semana, finalmente quedó aplazada hasta el día 25, de acuerdo con las conversaciones entabladas entre la portavoz del PSOE, Eva Montesinos, con sus homólogos de los partidos aliados.
A modo de autocrítica, el propio primer edil admitió en declaraciones públicas este mismo miércoles que quizá no se había explicado debidamente el motivo por el que se consideraba necesaria la promoción de los dos asesores. "Puede que haya faltado pedagogía", dijo. Sea como fuere, insistió en que se trata de una medida beneficiosa para la ciudad y descartó que se trate de un incremento del gasto, sino más bien sostuvo que en realidad es una inversión que redundará en el interés público. Eso sí, en principio, pase lo que pase en el transcurso de esa reunión de los tres socios políticos, lo que parece inamovible es la intención del PSOE de mantener esos nombramientos -acordados a través de un decreto de Alcaldía el pasado 28 de diciembre- y de llevar la propuesta a pleno (este mes o en febrero) para que se habilite la partida presupuestaria con las nuevas retribuciones de los dos interesados: Pedro de Gea y Miguel Castelló. De lograr el apoyo de 15 concejales (el PSOE cuenta con 6), ambos pasarán a percibir un bruto anual de 51.000 euros, en lugar de los 35.000 de su sueldo actual.
Hasta ahora tanto Guanyar como Compromís se han manifestado en contra de ese ascenso acordado de manera unilateral por el primer edil. Los portavoces de ambos partidos, Miguel Ángel Pavón y Natxo Bellido, vienen sosteniendo que la estructura municipal ya cuenta con suficientes altos cargos, que el pacto de gobierno hablaba de contención y austeridad en esa materia y que existen otros asesores o funcionarios que también llevan a cabo un importante trabajo sin que se promueva su ascenso. Es más, en Guanyar se sostiene que, a priori, esa promoción requeriría de una mesa de negociación para conocer cuál es la opinión de los delegados sindicales, que ya han lamentado que se les excluya de la posibilidad de mejorar sus condiciones laborales a través de procesos de promoción interna.
En Compromís, además, se duda de que resulte necesario forzar la normativa para aupar a ambos asesores a un cargo para el que no reúnen el perfil, ya que no son funcionarios. La ejecutiva del partido debía profundizar este martes en su posición, aunque la propuesta de nombramiento se apoya en un informe de Recursos Humanos en el que se acredita el segundo requisito previsto en la Ley de Grandes Ciudades para permitir ese tipo de designaciones: que los promocionados reúnen una probada experiencia en el sector.
La propuesta de nombramiento de los directores generales se apoya en un informe de Recursos Humanos en el que se acredita que reúnen sobrada experiencia en sus respectivos sectores: Comercio y Fiestas
En parecidos términos a los de Compromís se expresó también este miércoles el portavoz municipal del PP, Luis Barcala, quien sostuvo que nadie les ha justificado todavía cuál es la necesidad de ambos nombramientos. "Nos parece que en todo caso sería más necesario en otras parcelas que presentan mayores problemas como la de limpieza, urbanismo o contratación; ahí sí sería aconsejable que se recurra a un especialista o a un funcionario cualificado", explicó. En esta línea, añadió que el ascenso de ambos asesores no parece que sea viable desde el punto de vista legal, por lo que confirmó que si nadie lo justifica, su grupo votará en contra cuando se traslade a pleno.
La duda que resta por despejar es qué otros acuerdos o puntos programáticos podrían incluirse en el orden del día de la comisión de seguimiento del pacto. El portavoz de Compromís, Natxo Bellido, señaló el martes que sería bueno actualizar el acuerdo de gobierno como lo han hecho ya los tres socios del llamado pacte del Botànic que permitió la investidura de Ximo Puig como presidente de la Generalitat y la formación del Consell del mestizaje (PSPV-Compromís). La petición de convocatoria de esa comisión de seguimiento se produjo después de varios episodios en los que el PSOE ha tomado otra serie de decisiones sin tener en cuenta a Guanyar y Compromís. Los socialistas esgrimen que, en el tripartito, cada partido tiene cierto grado de autonomía en el ejercicio de sus competencias y que sus socios tampoco consultan todas sus gestiones.