Agustín Navarro. Foto: PEPE OLIVARES.BENIDORM. Cuatro opinómetros de la polémica adjudicación a Opino Media en Benidorm en la época de Agustín Navarro nunca se llegaron a meter en el inventario municipal, según fuentes municipales. El Ayuntamiento adquirió 19 máquinas para conocer la opinión de los ciudadanos, pero desde el primer momento sólo se incluyeron 15 dentro del inventario. ¿El motivo? No hay respuesta oficial. El portavoz del PP, José Ramón González de Zárate, indicó a este diario que ha pedido a Patrimonio que empiecen a localizar todos los opinómetros para saber dónde están y cuántos.
Hay que recordar que la adjudicación está ahora bajo sospecha por la forma en la que se otorgó el contrato a la mercantil vinculada a gente afín al PSOE y por la que han citado en calidad de investigado al exalcalde socialista Agustín Navarro.
A todo ello hay que sumarle un informe del secretario municipal fechado el 8 de mayo donde asegura que en la actualidad sólo tiene constancia de la ubicación de 12 de los 19 opinómetros.
Según consta en la documentación a la que ha tenido acceso este diario, tres de ellos están en "almacenes", otros dos en servicios sociales y centros sociales, dos más en bibliotecas, otros cinco se han transformado en máquinas para efectuar pagos administrativos. Pero, ¿Dónde están los otros siete que faltan? Es una duda que queda sin contestar en la respuesta que se le da al portavoz de Compromís-Los Verdes, Josep Bigorra, reclamada en los últimos días.
En el último inventario de bienes no aparece ni uno, mientras que en el 2012 tampoco, pero al parecer, podría ser porque se retiraron de los edificios públicos, según fuentes municipales. No obstante, piden a Bigorra que pregunte en Servicios Técnicos e Informática (el último departamento ya contestó que no había recepcionado en ningún momento dichos aparatos).
La adjudicación de los opinómetros dio que hablar desde el primer día. Su uso se limitó a 10.000 encuestas realizadas en 2011, que finalizó en 2012 cuando dejaron de contratar el "software" para poder realizarlas. Tiempo después, se modificaron seis aparatos por un importe de 31.930 euros con el fin de meterles otros sistema con el que poder realizar otras tareas administrativas.
El auto que ha puesto en la picota al exalcalde socialista hace referencia al pliego de condiciones de la licitación del contrato. Así, indicaba que la empresa en cuestión tenía que acreditar la solvencia técnica y profesional de la colocación de estos opinómetros en otros dos municipios. Algo que nunca llegó a acreditar con certificaciones de otros ayuntamientos, según consta en el auto, y por tanto asegura que se tendría que haber declarado desierta puesto que era la única oferta presentada.
La adquisición de estos elementos de participación ciudadana se realizaron a través del Plan E durante el mandato de José Luis Rodríguez Zapatero. Fueron 223.880 euros, que según dicta el auto, no se habrían perdido al declarar desierto el procedimiento. A todo esto, hay que recordar que había que sumar años después 32.625 euros para contratar a cuatro personas que los explicaran.
Por su parte, el único investigado por este contrato, Agustín Navarro, dijo estar tranquilo ante la citación y con ganas de explicarse. Incluso auguró que cuando lo haga, quedará todo en un archivo de su causa.
