De vender Afterbanks a Indra a crear Wealth Reader: David Lozano impulsa una nueva 'startup'

VALÈNCIA. El ingeniero David Lozano busca dar de nuevo con la clave del éxito tras vender en 2019 la compañía Afterbanks a Minsait, liderada por Indra. Una tecnología que permitía extraer y agregar datos de cuentas bancarias de diferentes bancos en tiempo real e iniciar pagos de manera instantánea y totalmente segura y que fue empujada por la normativa europea a la apertura de las aplicaciones bancarias para poder aunar de forma rápida el conjunto de las cuentas de una persona. 

Como se apuntaba, el cambio regulatorio que la Unión Europea impulsó hace tres años hizo accesible, previo consentimiento, al acceso a la información patrimonial de particulares y empresas. Sin embargo, éste quedó limitado a la lectura de información de cuentas bancarias, motivo por el Lozano, tras vender Afterbanks, pensó que era necesario seguir avanzando dada la nueva normativa que está por llegar.

Ahora, Wealth Reader atiende a la necesidad de completar la información patrimonial, por lo que ha desarrollado una API que lee y estandariza la información complementaria, como son las carteras de fondos y acciones o activos inmobiliarios. "Fui viendo que esa normativa se quedaba corta al ver que la información bancaria se utiliza para conectarte con otros bancos, pero también para darte un scoring para un préstamo", señala.

Un 'scoring' completo

"Al final, el que te daba el préstamo para el coche veía lo que había en la cuenta corriente y lo rechazaba porque tenía 3.000 euros, pero en el mismo banco tenía 50.000 en un fondo de inversión. El no tener la foto completa de todo lo que había estaba siendo un problema. Ahora, la Unión Europea va a sacar nueva normativa y nosotros estamos haciendo el producto al que va a obligar de aquí a tres años a los bancos", asegura. La compañía, a día de hoy, está acelerada por Lanzadera -como ya lo fue Afterbanks- y tiene en su capital a Angels, el vehículo de inversión de Juan Roig.

Cuando una gestora o banco se conecta a su sistema, le dan la información de cuentas corrientes, tarjetas, deuda, inversión o un seguro, previo consentimiento, para evitar todo el papeleo que conllevaría justificarlo de forma manual. "Es como si fueran tuberías para aplicaciones", señala. Un sistema cuya necesidad han visto en banca privada. "Allí, la cuenta corriente no sirve para nada, sino la inversión y las acciones que tienes. Hay mucho trabajo que se hace de forma manual, que se recoge de forma trimestral o anualmente y de esta manera el asesor financiero lo puede tener controlado diariamente", explica.

En busca de dos millones

La tecnológica también cuenta en su accionariado con Tres Coronas, Itnig, Waterhole Ventures y varios business angels, y ahora busca una nueva ronda de dos millones de euros para abrir mercados y mejorar el producto. A día de hoy conecta a 140 bancos de España, parte de Luxemburgo y Suiza y cuentan con una licencia del Banco de España. Entre sus casos de éxito, señala Abanca, que perdía de uno de cada tres clientes la parte de inversión cuando transfería sus cuentas. "Cuando tú te cambias de banco, el banco se trae tus recibos, pero en la parte de inversión se perdía. La conseguía del 70%, pero 1 de cada 3 clientes que tenía fondos al final no los transfería"; reconoce. Con su sistema, han conseguido poder completar el traspaso de productos.

"Hasta ahora existían soluciones que utilizaban esta información para automatizar actividades como la concesión de préstamos o la creación de herramientas de análisis y reporting financiero, pero de una forma imprecisa porque no podían acceder a los activos financieros de diferentes cuentas corrientes. Wealth Reader es el proveedor de OpenBanking que ofrece la conectividad con bancos y otras entidades más fiable y con mayor calidad del dato, lo que incluye la información sobre inversiones", insiste Lozano, cuya compañía ya cuenta con 9 personas y asegura que tiene una baja competencia por la complejidad tecnológica y legal del sistema.