Ediciones Humilladas prepara Desastre.doc, un fanzine que reflexiona sobre el amor, el desamor, la amistad, los celos y las rupturas a través de testimonios reales anónimos. Ahora mismo se encuentra en proceso de maquetación para ser presentado en la feria de autoedición
VALÈNCIA. Quien diga que no ha hecho el ridículo por amor miente, así de simple. Y quien tenga valor de hacerlo público aparecerá en Desastre.doc, el nuevo fanzine que están creando Mar de Marciana y Libertad Ballester desde Ediciones Humilladas, grupo compuesto también de la mano de Molotov (que son Helly Holiday y Aina Gime), Horro y Rötke. La publicación verá la luz en el festival Tenderete, que se celebrará el fin de semana del 4 y 5 enero en La Nau, una vez allí todas las historias de “vulnerabilidad romántica” que se componen a través de sentimientos y experiencias reales quedarán al descubierto. El fanzine busca, a través de las historias de intimidad, contar algo que al ser compartido “nos coloca a todos en el mismo lugar”, tal y como lo considera Mar: “Somos conscientes que el del amor es un tema manido, pero nos gusta trabajar en los lugares comunes. Es una buena manera de conectar con la gente, contar historias reales es lo que nos acerca”. Con voluntarios capaces de perder la vergüenza Ediciones Humilladas pretenden colocarnos a todos en el mismo plano del universo romántico, pasando a papel lo que de normal se habría quedado en una conversación privada de WhatsApp o aquellas confesiones que comenzarían por eso de “Querido diario…”.
La idea del todo surgió de una cena, en las que un amigo les contó a las “humilladas” que cuando la ansiedad le atacaba se ponía a escribir para él en su ordenador. Las historias las almacenaba en un documento desastre, que al guardarlo en formato Word se quedaba como “desastre.doc”. A través de este nombre random Mar y Libertad supieron que tenían que crear algo. Esta es su forma habitual de trabajar los conceptos sobre los que al final publican, así lo confiesa Mar, quien explica que del nombre nace la idea. También les pasó con su fanzine Mueble, una especie de catálogo de IKEA que se compone de fotografías de resaca y borrachera, y pone precios a los amigos más inanimados de la pandilla: “Pensábamos que en estos momentos nuestros amigos parecían muebles y de ahí surgió la idea. Primero nos sale el nombre y de ahí lo desarrollamos todo”.
Volviendo al amor, para conformar el Desastre.doc la dupla decidió hacer un llamado de emergencia a través de Instagram para que sus seguidores les compartieran esas historias de corazón pisoteado, de amor, desamor, notas declaratorias, e incluso con cabida para conversaciones de Tinder desastrosas. No importa el formato, tan solo la historia pura en la que en algún momento se hable de un corazón roto. A sabiendas de la complejidad del asunto (y del drama que se podría generar) las aportaciones aparecen de forma totalmente anónima, con la única intención de hacer un ejercicio conjunto de oversharing en el que todos los sentimientos son válidos y la intensidad no es cosa mala. A través del análisis grupal buscan dar un paso más allá en eso de comprender los sentimientos de talante más complejo: amistad, ruptura, intensidad y todo lo que quepa en un corazón malherido (incluido el de las creadoras, quienes también participan).
“Es cosa de ser autocrítico, pensar en que lo que escribiste es un desastre y que está bien, no pasa nada por ello”, explica Libertad, a lo que Mar añade: “Es un ejercicio de vulnerabilidad, si todos nos mostráramos vulnerables se destruirían las fachadas y todo lo malo se iría a la mierda”. Aunque a su vez si todo se fuera “a la mierda” no existiría el fanzine, claro. Al final el amor se convierte en excusa para hablar sobre gestiones, intimidad y para hablar de uno mismo a través del autoconocimiento y el autocontrol, explica Mar: “Este fanzine va sobre conocerse a uno mismo y marcar los límites. Puede ser algo de la vida privada de cada uno y que puede ayudar a que nos comprendamos a nosotros mismos”, y añade, “no solo hablamos de la contemporaneidad, hablamos de nuestras expresiones del amor en la infancia y la adolescencia, todos hemos pasado por ahí y está bien compartirlo”.
A través de las aportaciones recibidas las "humilladas" reflexionan sobre el momento en el que abundan este tipo de creaciones de amor desastrosas: la adolescencia. "En ese momento no había vergüenza, ni una ola de nada [ni de feminismo], tampoco había nadie al volante", comenta Mar entre risas. Ese momento se asemeja mucho al de un arrebato emocional, sin importar la edad del afectado, en el que se vuelve a la adolescencia emocional y las palabras vuelan sin ningún criterio. Todo ello toma forma el Desastre.doc de decenas de personas, que se crean con recortes de diarios privados, audios, grafitis de reconquista y esos mensajes que aparecerían en la otra pantalla como "Mensaje eliminado".
Tras la revolución musical de los 60 y el efecto que tuvo en grandes masas de jóvenes, la industria musical se apresuró a convertirlos a todos en clientes, a los artistas en productos y a las escenas en mercados. La ciencia económica pronto se mostró incompatible o reticente a la frescura del arte y algunos adolescentes de la época iniciaron una pequeña nueva revolución. Bomp! fue uno de los fanzines más importantes que hicieron de la autoproducción y los sellos independientes una cultura que estalló con el punk