Manresa lanzará la idea durante el debate de Fogueres Culturals coorganizado con Aguas de Alicante este miércoles y después trasladará una propuesta formal al sector de la fiesta
ALICANTE. La fiesta de Fogueres está estrechamente ligada a la idiosincrasia de Alicante y a su cultura, pero, si a lo largo de su historia hay algún monumento que esté más relacionado con ella es el que diseñó y pintó el insigne artista local Emilio Varela, conocido en todo el país. Aprendió el arte de la pintura con Lorenzo Casanova y fue después discípulo de Joaquín Sorolla, quien le introdujo en el ámbito cultural e intelectual de la ciudad de la mano de otras personalidades como el compositor Óscar Esplá y el escritor Gabriel Miró. La primera mitad de los años treinta fue un periodo de gran actividad para Varela. En 1934, conocedor de las dificultades económicas que atravesaba la comisión de la hoguera del barrio de Santa Cruz (ahora desaparecida), se ofreció para elaborar un boceto y encargarse después de su construcción. Una labor para la que contó con la ayuda del escultor Daniel Bañuls (hijo del también artista Vicente Bañuls) quien, unos años antes, ya había dejado para la historia una de sus obras más célebres, la Fuente de Levante, en la plaza de los Luceros.
Ensomni del bon alacantí era el título de esa hoguera que en el mes de junio de aquel año se plantó en la calle San Rafael. La incursión del polifacético Varela en el arte de Fogueres se basó en una estructura en forma de cubo (de dimensiones reducidas en comparación con el resto de hogueras), donde el pintor plasmó diferentes escenas en las que trataba de resaltar los valores del alicantinismo que, en su opinión, se estaban perdiendo. La particularidad de este monumento que alcanzaría aproximadamente los dos metros y medio radicaba en que además incluía una escena interior en la que se representaba una habitación típica con el mobiliario y los elementos decorativos de la época. "Varela se ofreció a hacer una pequeña hoguera que no tenía ninots sino que consistía más bien lienzos pintados en los que hablaba de las tradiciones alicantinas", explica Santiago Linares, del Archivo Municipal de Alicante. "No era la típica hoguera con crítica local, así que llamó mucho la atención", describe.
"Los intelectuales alicantinos y otra mucha gente acudió a verla, así que dio mucha satisfacción a la gente del barrio", comenta Linares. Por su tamaño y sus características, compitió en la Categoría B, aunque logró hacerse merecedor del Primer Premio de dicha categoría, que entonces estuvo remunerado con 750 pesetas. Pero la fiesta efímera por excelencia no desaparece del todo y deja su huella en documentos que ahora se atesoran en el Archivo Municipal. "Los bocetos originales se conservan porque, desde 1929 hasta 1972, los artistas los presentaban en el Ayuntamiento para que sus proyectos fueran aprobados, formando así una colección en la que se incluyen los dibujos originales de Heliodoro Guillén, Adelardo Parrilla, Gastón Castelló, Lorenzo Aguirre o Emilio Varela", apunta. La colección incluye además otras piezas como los llibrets oficiales, fotografías, libretos de mano, etcétera.
"La fiesta ha creado un gran patrimonio documental", afirma Linares. Precisamente esa será la base del debate online que se celebra este miércoles, a partir de las 19 horas, bajo el título Fuego de la creación: artistas en Fogueres. El evento, que se enmarca dentro del programa Fogueres Culturals de la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Alicante, está coorganizado con Aguas de Alicante y se retransmitirá en streaming a través de las redes sociales oficiales de ambas entidades. Estará moderado por José Manuel Lledó y contará con la participación de expertos en la materia como Juan Carlos Vizcaíno, José Luis Ferris, Mari Carmen Baeza y el propio Santiago Linares.
Según ha confirmado a Alicante Plaza el concejal Antonio Manresa, durante este foro de debate se anunciará la propuesta del área que dirige para reproducir este monumento de Emilio Varela y volver a darle forma aunque sea, como en aquel momento, de forma efímera. "Nos parece interesante que se pueda llevar a la actualidad", confirma el edil. De esta forma, 87 años después, se podrán volver a disfrutar de una obra singular que había sido pasto de las llamas y que había pasado a la historia. "Lo vamos a ir hablando con las partes implicadas, que son la concejalía de Fiestas y la Federació de Fogueres, para que a partir de ahí se pueda definir el proyecto y los constructores que lo llevarán a cabo; el objetivo es que se pueda hacer de forma fiel a lo que de verdad hizo Varela", explica. Si se confirma, se sumará a los encargos que ya ha recibido el gremio de artistas. "Cultura se quiere implicar en las Hogueras echando una mano y ayudando al sector, que está pasándolo mal", sentencia.