BENIDORM. "El Low no nos deja regalar entradas", dicen desde Ciudadanos de Benidorm. Según explicaron a este diario, han recibido un nuevo correo por el cual les explican que las normas del festival recogen que no se puede sortear abonos sin haber pedido consentimiento. Algo que de haberse producido, tampoco se lo hubieran dado después de asegurar fuentes de Producciones Baltimore, organizadora del Low, que no se quieren vincular con ningún partido político.
Motivo por el cual este miércoles solicitaron al partido de Juan Balastegui que retirara estos abonos del sorteo que está realizando. La formación naranja había impulsado una iniciativa un poco peculiar, en el que daban a conocer 10 propuestas para la ciudad, y el participante tenía que elegir una de ellas como su preferida, dar su nombre y apellidos, así como un email (el teléfono era opcional).
De este modo querían extender sus propuestas a uno de los sectores más alejados de la política así como del propio partido de Albert Rivera, el público joven. Sin embargo, han tenido que cambiar estos abonos comprados por ellos mismos, por "Estancias para el festival indie en Benidorm Julio 2019". Es decir, dos noches de hotel durante la celebración del Low, al que no han querido ni mencionar para evitar más problemas.
Tal y como indicaron desde Cs de Benidorm, la organización les ha manifestado que no pueden sortear las entradas porque sus propias normas indican que los que compran los abonos, tienen que disfrutarlos ellos mismos. La organización aseguró a este diario que durante el jueves habían vuelto a mantener conversaciones con el partido, pero no quisieron hacer más declaraciones al respecto para no magnificar el asunto.
La iniciativa llamó la atención de sus compañeros políticos no solo por el simple hecho del sorteo, sino porque fuera con abonos del Low Festival. Un evento que supuestamente habría criticado el grupo municipal en estos últimos cuatro años. Sin embargo, el candidato a la alcaldía por Cs, Juan Balastegui, explicó que ellos solo han criticado uno de los aspectos: la ubicación.
El festival se celebra a escasos metros de los edificios de residentes, en un casco urbano plenamente trabajador, donde no se ha extendido el alojamiento turístico. Es por esto que ha sido uno de los elementos más discordantes con el Low. No obstante, Balastegui afirmó que defiende el evento por ser una forma de atraer a turistas jóvenes, un sector que siempre está tratando de seducir hasta la capital de la Costa Blanca. Además, todo ello en un ambiente sin apenas incidentes.