CALP. La empresa concesionaria de Puerto Blanco en Calp está hallando complicaciones en Demarcación de Costas para poder sacar adelante el proyecto de reactivación de este puerto, lo que está generando que el inicio del plan lleve ya dos años de retraso. Exigen que se cambie el proyecto, contemplando un retranqueo para dar más espacio a una playa anexa.
La mercantil Marina Miramar se hizo con la concesión que sacó la Generalitat Valenciana en diciembre de 2020 con el objetivo de rehabilitar este enclave portuario y crear una serie de infraestructuras como paseos sobre los diques y nuevos amarres, pero todo esto está paralizado.
La iniciativa contaba en su momento con el visto bueno de la Conselleria de Política Territorial y Obras Públicas y del Ayuntamiento de Calp. La empresa, Marina Miramar, anunció los cinco millones de inversión y el tiempo aproximado de actuación. “En verano de 2022 estaría todo acabado, pero no es así por las pegas de Costas”, han apuntado desde el Ayuntamiento de Calp.
Pero Marina Miramar ha topado con Costas, que quiere que la concesionaria corrija su proyecto: “La empresa tiene una concesión y un espacio delimitado, pero Costas le pide que realice un retranqueo del puerto y deje más espacio para la playa que hay junto a este enclave, la playa de Puerto Blanco”. “Es un tramo de costa pequeño pero con mucho encanto y Costas quiere que el puerto le dé espacio a la playa, por eso no le da el permiso para actuar”, han agregado.
Desde el Ayuntamiento recuerdan que esta zona es “muy importante”. “Hay muchos vecinos en el entorno y locales y restaurantes de mucho prestigio, por lo que esta zona no merece estar en esta situación”, ha precisado la alcaldesa de Calp, Ana Sala. “Los vecinos tienen que saber que todos estos problemas vienen de Costas. Nos reunimos con ellos las veces que son necesarias y les llamamos, pero no hay forma de avanzar”, ha lamentado.
La empresa se comprometió a realizar una inversión de cinco millones y reactivar esta importante zona bajo el nombre de Marina PortBlanc. El proyecto contempla la mejora generalizada del puerto, con la creación de paseos sobre los diques, la puesta en marcha de más 200 amarres. Sala ha recordado que la zona ha estado abandonad por la Generalitat. “En 2016 se hizo una inversión de 600.000 euros en un dique y desde entonces estuvo olvidada hasta la concesión a finales de 2020”, ha finalizado.