MADRID (EFE). Un fallo del portero Kiko Casilla, que propició el gol del argentino Ángel Correa en el minuto 39, da ventaja (1-0) al Atlético de Madrid al descanso del partido contra el Elche en el Wanda Metropolitano, escenario de un duelo discreto de los locales y al que regresó la afición rojiblanca un año y medio después.
Un pase largo de De Paul, en una recuperación en medio campo del conjunto rojiblanco, provocó un gol imprevisto, porque su envío era del guardameta, para despejarlo sin más. Pero dio al aire. Y habilitó a Correa para quedarse solo ante un defensa. Primero recortó, después puso el balón en la escuadra con el exterior.
Una ocasión, en toda la expresión de esa palabra, y un gol para el Atlético, controlado hasta ese momento por el Elche, cuyo buena primera parte defensiva quedó ensombrecida por un fallo.