Los médicos consideran que podrá incorporarse a los entrenamientos tras un plazo de "readaptación intensa" de ocho semanas
ALICANTE. Gabriel Corozo sigue avanzando en su recuperación y ya ve la luz al final del túnel.
El jugador del Elche evoluciona favorablemente tras ser intervenido a finales de noviembre de una fractura osteocondral del fémur de la rodilla derecha y ahora iniciará un proceso de readaptación intensa que se prolongará por espacio de ocho semanas.
Ese es el pronóstico de los doctores Pedro Luis Ripoll y César Quesada que han examinado al jugador ecuatoriano en las instalaciones del FIFA Sport Clínic Ripoll y de Prado en Elche.
Superado ese plazo de readaptación sin novedad, Ripoll y Quesada consideran que podrá incorporarse a los entrenamientos.