El Consell pide garantías en drenaje para ampliar suelo industrial en Las Atalayas de Alicante

ALICANTE. La ansiada ampliación del área empresarial de Las Atalayas, en Alicante, tendrá que esperar. Al menos, hasta que pueda subsanarse el que pasaría por ser el último requerimiento para que pueda superar el filtro de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio. La exigencia de ese ajuste se puso sobre la mesa en la reunión de la comisión de evaluación ambiental celebrada el pasado jueves, 25 de enero, en la que se analizó la modificación puntual número 43 del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) planteada por el Ayuntamiento de Alicante, con la que se aspira a crear otros 650.000 metros cuadrados de suelo apto para la instalación de empresas.

El estudio de la propuesta llevó a la comisión a elevar una consulta al departamento de Planificación Territorial para que se precisase si la propuesta municipal se adaptaba a las condiciones de prevención de riesgos de inundabilidad recogidas en el Patricova. Y la respuesta se produjo con una formulación de instrucciones y recomendaciones a incorporar en la modificación de planeamiento para garantizar que en la futura urbanización de ese nuevo suelo industrial se contemplen mejoras en cuanto al drenaje y encauzamiento de aguas, a la vista de las condiciones orográficas por las que se caracteriza el entorno del actual recinto empresarial, ante la proximidad del trazado de la A-31, de la A-70 y del curso del Barranco de Aguamarga. Es decir, el espacio sobre el que se planea su ampliación. Ese requisito se hace especialmente necesario en la medida en que esa extensión del polígono conllevaría la creación de al menos un nuevo acceso desde la A-31, lo que podría generar otra barrera física adicional para la escorrentía de aguas.

En concreto, como viene informando este diario, la propuesta de modificación del PGOU vigente promueve la recalificación de suelo no urbanizable en los bordes del polígono a través de la figura del remate de trama, que permite agrupar suelos situados en los límites del recinto empresarial actual, que en parte ya acogen algunas edificaciones industriales preexistentes, para poder cambiar su calificación urbanística sin necesidad de que esa ampliación tenga que quedar demorada hasta que pueda completarse la revisión del Plan General Estructural (ahora en su fase inicial, tras la recopilación de informes previos).

Así, se plantea la reclasificación de tres bolsas de suelo no urbanizable, a los que se ha dado la nomenclatura de PAU 6, PAU 7 y PAU 8 en continuidad con los PAU ya previstos en el PGOU actual, que se desarrollarían de forma simultánea a través de planes parciales específicos. El primero (PAU 6), situado al sur del área empresarial, sumará 120.938 metros. El segundo (PAU 7), en la zona este, procurará otros 277.815 metros. Y el PAU 8, próximo al Bacarot, otros 131.415 metros.

Con ello, se conseguiría disponer de algo más de 300.000 metros netos para la instalación de empresas, una vez descontada la superficie necesaria para la configuración de viales, lo que permitiría dar salida a las necesidades de implantación de nuevas empresas -o de crecimiento de las instalaciones de las ya asentadas- que vienen constatándose en los últimos años, sin que puedan atenderse las demandas de las compañías interesadas ante la ausencia de parcelas libres con el tamaño requerido.

Todo ello, en un contexto en el que el área empresarial ha conseguido el reconocimiento como área industrial avanzada por parte de la Generalitat, lo que permite acceder a mayores subvenciones autonómicas para la reurbanización, equipamiento y modernización de sus instalaciones. Por lo pronto, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante, del Partido Popular (PP), prevé aprobar este martes, en Junta Local, una nueva solicitud de fondos al Ivace para acometer nuevas mejoras en el recinto empresarial. Y, en paralelo, también se prevé aprobar los proyectos de la segunda y tercera fase del plan de renovación de asfaltado de sus viales.

Más crecimiento

En todo caso, el objetivo de generación de suelo apto para la instalación de empresa no se limita al área empresarial de Las Atalayas. Como mínimo, así se puso de manifiesto este jueves en un encuentro de trabajo celebrado entre representantes del equipo de gobierno y responsables de la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio en la que se compartió la necesidad de promover el desarrollo de más suelo industrial en el término municipal para satisfacer la demanda existente, según precisaron el alcalde, Luis Barcala, y la consellera Salomé Pradas, al término de la reunión.

Y en sintonía con ese propósito se enmarcó la reunión previa celebrada este miércoles entre la edil de Fomento, Mari Carmen de España, y el concejal de Promoción Económica de Elche, Samuel Ruiz, en la que también se convino la necesidad de solicitar al Consell que promueva la modificación de la Ley Territorial de Suelo Industrial para canalizar la ampliación de las áreas empresariales de ambos municipios.