VALÈNCIA. Compromís ha decidido finalmente no acudir a la reunión convocada por el presidente de la Generalitat, Carlos Mazon, para pactar cuestiones de la agenda valenciana –como reforma de la financiación autonómica o inversiones–, además de otros asuntos como la renovación de los órganos estatutarios.
La coalición se ha pensado durante varios días su estrategia en el asunto y este martes el portavoz en Les Corts, Joan Baldoví, ha respondido a la carta que le envió el jefe del Consell para comunicarle que no asistirá a la cita. En la misiva, circunscribe el diálogo sobre los asuntos de la agenda valenciana al debate parlamentario.
Argumenta, de este modo, que dialogarán con el PP cuando exista una postura unánime dentro del propio Ejecutivo autonómico en cuestiones como la deuda y cuando condene las actitudes de Vox.
"Entendemos que no estamos invitados a una sesión de trabajo serio y sistemático para buscar un acuerdo, sino a una escenificación para blanquear las repetidas acciones del Consell y de la mayoría que le da apoyo que van en contra, precisamente, del espíritu de diálogo y de acuerdo", expresa Baldoví.
Mazón aprovechó el pleno monográfico celebrado el pasado miércoles en Les Corts sobre la amnistía y los pactos del PSOE con los independentistas para tirar de golpe de efecto y cambiar el paso en un debate en el que las posiciones de los grupos de la derecha y de la izquierda se encuentran muy alejadas. Así, dirigió una propuesta a los partidos de la oposición: coordinar acciones de todos los diputados de la Comunitat Valenciana tanto autonómicos como nacionales para condicionar el apoyo a los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
El guante que lanzó fue el de llegar a un entendimiento entre todas las fuerzas –incluyendo PSPV y Compromís– para exigir en las próximas cuentas un nuevo sistema de financiación autonómica; una distribución de inversiones en la Comunitat Valenciana acorde al peso poblacional; y un calendario creíble del pago de la deuda por el gasto derivado de la atención sanitaria a pacientes desplazados de otras comunidades y extranjeros (el conocido como Foga histórico).
El jefe del Consell pidió al resto de partidos que todos trabajen conjuntamente las enmiendas a los PGE en un frente común por los "asuntos fundamentales" de la Comunitat, entre los que también incluyó la recuperación del Derecho Civil Valenciano.
A la oposición le ha llevado varios días centrar el tiro de la estrategia, entre entrar o no al juego. En el caso del PSPV, acudirán, aunque no lo hará el expresidente de la Generalitat Ximo Puig sino la portavoz en Les Corts, Rebera Torró, y el portavoz adjunto Arcadi España. No quieren que un plantón se interprete como una falta de diálogo, aunque realmente no existe la menor predisposición para llegar a acuerdos con la derecha.
En Compromís han virado. Inicialmente dijeron que se sentarían a hablar con Mazón aunque desdeñaran de entrada un acuerdo. Pero ahora directamente han decidido no acudir y visibilizar ese plantón. Una actitud que le da vía libre al presidente de la Generalitat para criticarles por falta de diálogo y defender su argumento de que al menos intentó el entendimiento con un partido que no quiere defender conjuntamente los asuntos clave de la agenda valenciana. Y todo lo cual demuestra, en realidad, que ese acuerdo sólo podía abordarse desde la apariencia porque desde el principio era prácticamente imposible.
En todo caso, Baldoví marca la postura de Compromís. "Coincidimos en el valor del diálogo y acuerdo entre diferentes en una sociedad democrática avanzada. Ahora bien, no se puede confundir el diálogo con un monólogo, ni el acuerdo con imposición. Conceptos tan nobles no pueden ser usados como excusa para propiciar fotos sin contenido, sino que han de ser prácticas constantes de un gobierno y una mayoría parlamentarias en su día a día. Las palabras han de ir acompañadas de hechos que le den credibilidad", señala el síndic de la coalición.
En su opinión, "no es coherente hablar de diálogo con la oposición mientras se utilizan de forma partidista Les Corts", en referencia a la negativa al uso de la palabra a un diputado de Compromís en el último pleno. "Además, hemos vivido otros episodios que apuntan hacia una creciente degradación democrática de las instituciones valencianas, como la imposición de un protocolo que invisibiliza la condena de la violencia machista, la censura en las instituciones culturales valencianas, los vídeos señalando a representantes legítimos de los valencianos, la presencia de miembros del Consell en el acoso a sedes de partidos políticos (PSPV) o hasta el insulto directo de un conseller hacia un diputado de mi grupo parlamentario en una sesión de comisión sin posterior disculpa", expone Baldoví.
El síndic de Compromís prosigue: "No es coherente hablar de diálogo y acuerdo sobre la agenda valenciana cuando aún desconocemos el posicionamiento del Consell en esta materia. Si no tiene la capacidad de contar con una posición común y unificada en temas tan importantes como la necesaria condonación de la deuda entendemos que lo que se nos plantea no es un diálogo institucional en nombre de la Generalitat sino entre partidos políticos, por el cual cuentan con espacios más consolidados como el propio parlamento o la Plataforma Per un Finançament Just, donde recientemente hemos reafirmado nuestros compromisos junto a los agentes sociales". Igualmente, critica la modificación de la ley de À Punt para que los miembros del Consell Rector puedan ser elegidos por mayoría absoluta
"Una vez el Consell acuerde una posición común sobre la agenda valenciana, le planteamos la posibilidad de remitir una comunicación es Les Corts para poder debatir su contenido y acordar las propuestas de resolución que los grupos parlamentarios consideren oportunas. Asimismo solicitamos la convocatoria urgente de la comisión mixta Consell-Corts para la reforma del sistema de financiación y valoración de la deuda histórica con la asistencia de los expertos para poder trabajar las oportunidades que abre la nueva situación política en el Estado", zanja Compromís.