ALICANTE. Tal y como se anunció hace unos días, el Ayuntamiento de Alicante debería devolver al Gobierno 13,3 millones de euros que recibió de más del Gobierno durante el año 2020. Sin embargo, el Ministerio de Hacienda ha decidido perdonar a todos los consistorios esta deuda, generada por la situación excepcional vivida durante ese ejercicio. Desde la coalición progresista se teme que este dinero se destine a aumentar los más de 100 millones de euros que el bipartito de Barcala tiene guardados en los bancos a causa de su incapacidad demostrada para ejecutar inversiones útiles que sirvan para transformar Alacant.
Desde Compromís per Alacant se propone que este dinero sea destinado a proyectar convocatorias de ayudas a particulares y negocios para afrontar la renovación de electrodomésticos y maquinaria que sea más eficiente energéticamente, así como en bonos de movilidad sostenible para la compra de bicicletas y patines eléctricos y el bono comercio para favorecer las compras de proximidad. En este sentido, el bipartito debería abrir en septiembre una negociación con el resto de grupos municipales para pactar toda una serie de medidas e inversiones, como las que Compromís ha venido reclamando durante estos meses, que desemboquen en una modificación de crédito pactada que fuese encaminada a amortiguar los efectos que se están viendo de las crisis climática y energética que, junto con la inflación, está marcando la vida de la mayoría social alicantina. En estas negociaciones, como ha apuntado Bellido, "hay que dejar al margen los planteamientos negacionistas de los socios ultras del PP, que se han visto definitivamente superados por una realidad terrible y tozuda como es la del cambio climático que nos afecta directamente a las ciudades del Mediterráneo".
Como ha explicado Bellido, "debemos ayudar a la ciudadanía, a nuestros autónomos y pymes, a afrontar el reto de la transición ecológica y los gastos que conlleva. Es necesario acompañar en este proceso a ciudadanía y empresas y lo podemos hacer desde el apoyo e impulso público, más todavía en una administración como el Ayuntamiento de Alacant que tiene el dinero engordando las cuentas de los bancos. Le pedimos a Barcala que deje de actuar como si fuera el Tío Gilito alicantino e invierta los ahorros en inversiones para la transformación ecológica de nuestro modelo de ciudad y en ayudas para que esa transformación sea llevada a cabo por el conjunto de la sociedad y nuestros sectores económicos".
En declaraciones del portavoz municipal, "Barcala debería tomar ejemplo de las medidas que están tomando otros ayuntamientos, como el de Elx, que va a sacar un paquete de ayudas destinadas a promover y hacer accesible la transformación energética que debemos acometer tanto en el ámbito privado como profesional, para ahorrar en nuestra factura energética, promover la economía verde y sostenible y avanzar hacia la neutralidad climática de nuestras ciudades".