en la frontera / OPINIÓN

Coca Cola para todos y algo de comer

24/01/2021 - 

Como todos sabemos (o casi todos, hay quien no se entera ), el consejero murciano de Sanidad, Manuel Villegas (PP), dimitió hace escasos días por ponerse la vacuna del covid: él y una pequeña legión de funcionarios públicos. Ni al consejero, ni a la legión, les tocaba. Dimisión forzada por Cs, que forma parte del Gobierno regional, incluido un sonoro ladrido de Inés Arrimadas. Se trata de una prevaricación ética y se trata de echarle más morro al asunto que un oso hormiguero. Lo mismo que el matrimonio happy de la Marina Alta, los alcaldes de El Verger y Els Poblets, Ximo Coll y Carolina Vives (PSOE), jóvenes y estupendos, y pioneros en esta marathon de a ver quien es más listo (o lelo). También el alcalde de Rafelbunyol, Fran López (PSOE), muy guapetón, aminorado de peso. Ximo Puig, de momento, ha tenido un gesto coherente, aunque sea de cara a la galería: suspenderles de militancia. Menos da una piedra. Y que no se pongan la segunda dosis (tampoco es eso). Ferraz va más lejos: que dimitan los regidores y cargos públicos socialistas que se ha saltado la cola.

También el concejal de Sanidad de Orihuela, José Galiano (PP)...también el alcalde de La Nucía y diputado provincial Bernabé Cano (PP, pata negra, superviviente de mil vaivenes). Ahí vamos. Toni Cantó, líder regional de la formación naranja, textuales: "Corrupción intolerable; sinvergüenzas”. Eso es lo que ha dicho el actor de Las Comedias Bárbaras refiriéndose a todos, y en especial a don Cano (no es nada personal, Bernabé, Cantó te ha llamado sinvergüenza). El también portavoz naranja en Les Corts emitió la fatwa el pasado miércoles, ni mi palabras más. Mensaje: dimisión del alcalde de La Nucía, al menos como diputado provincial. 

Receptores del mensaje: Julia Parra y Javier Gutiérrez, los dos diputados provinciales de Cs que complementan subsidiaramente la mayoría absoluta del grupo de Gobierno (PP). Interferencias emisor/receptor: sí pero no, subo pero a la vez bajo, meo pero no me sale gota, que se le quiten las competencias pero no el sueldo (casi 6.000 euros brutos al mes, prorrateando las extras)…. Al final, una solución “ligth”: le quitamos las competencias pero le respetamos los casi 6.000 y a la espera de una comisión de investigación para devolverle cuanto antes su área de gestión (Deportes). Pelillos a la mar.

¿Y la fatwa de Toni, también de Inés Arrimadas? Carlos Mazón se los ha llevado al huerto, como casi siempre ( las dotes de seducción de don Carlos son infinitas). Así lo ha apreciado el diputado provincial del Compromís, Gerard Fullana: su formación política está, de momento, libre de polvo y paja. Gerad puede permitirse el lujo de ser un verso suelto. Otro cantar es el del portavoz socialista Toni Francés: vivo sin vivir en mí, y tan alta vida espero, que muero porque no muero. ¡Ay!

A mí personalmente, me divierte este espectáculo. Porque saca lo peor de los partidos, ese consciente nada freudiano del " tu más". Tangible e insoportable. Con argumentos peregrinos que conducen a la indigestión. Como la diferenciación entre cargo público no electo (el consejero murciano) y cargo público electo (la pandilla citada en estas líneas), que es lo que han hecho los naranjas en Orihuela, en un ejercicio vacuo de distinguir entre galgos y podencos. No pretendo ponerme Torquemada. No. Pero el pillaje "vacucional" me entristece. Se lo dije el otro día a Carlos Arcaya en la tertulia de Radio Alicante: "Estamos donde siempre, en la España de la picaresca, la del Lazarillo de Tormes". En fin. Coca Cola para todos y algo de comer; en tu fiesta me colé. Y yo, querido Juan Carlos de Manuel, sigo sin oír el ruido de la nieve. Me consuelo con la violenta y convulsa estética de los amaneceres en el Camp d’Elx.

Coda: Felicito a Alicia Garijo, directora de la sala Arniches, por su coraje y perseverancia. Y por habernos traído el viernes a la compañía de Yoshua Cienfugos con el estreno de aIsla2: un montaje brutal, con reminiscencias dadás, al Cabaret Voltaire, y al glorioso Berlín de entre-guerras. Danza, texto y música. Arte en resistencia; en ebullición. 

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