Vía libre a la regeneración de Carrús Este y pasarela voladiza en Elche: Fuster Arquitectos lo diseñará en un mes

ELCHE. Era cosa de dos la regeneración del proyecto de Carrús Este y la pasarela volante, entre Estudio Ras y la alianza formada por Fuster Arquitectos e Ingemed. Pero finalmente será esta última, la UTE, la que se encargue del proyecto, al haber ganado por literalmente 29 centésimas. Se han impuesto por una puntuación de 84,29 puntos frente a los 84 de Estudio Ras. Ahora el plazo que tienen para entregar el diseño será de un mes, un horizonte temporal que ofrecieron como mejora los dos aspirantes, ya que la actuación se financia con los fondos europeos Edusi, y tiene que estar ejecutada a 31 de diciembre de 2023.

Propuesta más cara pero más acorde a lo que pide el Ayuntamiento

Mientras que Ras, firma que diseñó la pasarela del faro de Santa Pola, ofreció un precio más competitivo y una mejor oferta de recursos humanos, obtuvo una menor puntuación con respecto a la propuesta de Fuster, porque su planteamiento de pasarela volante no cumplía con los requisitos exigidos por el Ayuntamiento. A priori, evitando ese toque aéreo con el que al menos parte de los vecinos han mostrado su contrariedad en varias ocasiones, también al equipo de gobierno. El máximo de la puntuación en el diseño de la pasarela era de 26 puntos, lo que obtuvo Fuster, mientras que Ras obtuvo 10 puntos. Según el informe técnico:

La solución alternativa propuesta no se adapta al Anteproyecto, en concreto a la Fase II, técnicamente más compleja. Con la documentación gráfica aportada no es posible apreciar la integración con el entorno urbano existente [...] En la solución aportada la distancia entre luces se considera insignificante.

Mantenimiento de privacidad de vecinos y colegio

Así pues, se encargarán Fuster e Ingemed del diseño y futura dirección de obras. En ese planteamiento han obtenido la máxima puntuación, lo que contemplaba la integración urbana no destacando su imagen respecto a lo existente y mantener la privacidad de edificios aledaños —una de las preocupaciones vecinales—, adaptación al entorno natural del río, integrarse con el colegio Ausiàs March y "mantener la privacidad del colegio" e implantar luces entre apoyos. Su redacción de la actuación tendrá un coste de 222.254,12 euros. En cuanto a la materialización de la obra, el plazo será de un año a partir de cuando se adjudique, aunque se intentará acortar los plazos ofreciendo una mejora de puntos a quienes se comprometan. Con todo, el calendario para que esté ejecutado a 31 de diciembre del año que viene es muy ajustado.

Actuación total

Por último, cabe recordar que ha sido un proceso administrativo largo, con varias piedras en el  camino, empezando por la impugnación que paralizó el concurso retrasando varios meses el trámite, que se remonta a hace casi un año, en enero de 2022. La ejecución de la obra está valorada en 3,9 millones de euros de tope para el futuro contratista (aún quedaría esta licitación). El ámbito de actuación abarca una longitud de 900 metros lineales a desarrollar en tres fases en una   superficie aproximada de 43.200 m². La segunda fase será la de la pasarela volante, con una intervención comprendida entre la prolongación de la calle Ferriol y la calle Francisco Miller Giner (continuación de Olegario Domarco Seller). Se plantea habilitar en la zona central entre las calles Padre Palau, Clara Campoamor y Juan Maciá Esclapez un aparcamiento en superficie de 103 plazas, actualmente sobre tierra, con una zona de jardín en la parte recayente al cauce que actuará como mirador. A priori se quería impulsar un aparcamiento subterráneo de pago de varias plantas, pero los Edusi no financian esta actuación.