VALÈNCIA. Siempre hay una buena excusa para hablar del amor, y la de la cantante valenciana Carlota es renovarse, a través de su tema Collar en forma de corazón, el single que da un breve adelanto de lo que será su próximo EP: El bicho que me picó, en el que habla del amor y los sentimientos con una banda sonora cuqui pop y letras divertidas.
Para ello Carlota hace un ejercicio de introspección y habla sobre ese amor que va cambiando con las personas y las fases vitales, reinventándose de cero y actualizando su narrativa sobre este sentimiento: “Noto como el amor florece como por fases, no es lo mismo lo que escribí hace dos o tres años que lo que escribo ahora, que tengo una manera de expresar mejor mis sentimientos. Me gusta la idea de ir haciendo un update del amor”, explica a este diario.
El tema va acompañado de un videoclip, dirigido por Istar Gutierrez y Xenia Rubio, cantante y amiga de Carlota, a quien le confía la creación del grupo de trabajo, compuesto en su mayoría por mujeres valencianas. Cuenta Carlota que con el cambio de estilo al que se presenta en esta nueva etapa trabajar con “amigas” le proporcionaba seguridad a la hora de mostrarse en su versión más infantil frente a la cámara.
“Ver caras conocidas y amigas tras la cámara hace que me sienta con una conexión muy buena a la hora de grabar. Como el equipo está conformado por chicas como yo noto que no paso vergüenza al moverme frente a la cámara. Siento que no está esa mirada masculina que puede juzgar en según qué casos”, comenta la artista.
A su vez, sus compañeras de trabajo resultan al mismo tiempo su público objetivo, ya que Carlota canta para mostrar las realidades de esa generación a la que pertenece, la Z: “Yo escribo cosas muy personales que seguramente puedan ayudar a otras personas a sentirse representadas. Hablo de cómo veo mis relaciones de amistad, familia y amor y de los problemas y las virtudes de mi generación, que es donde creo que puede conectar más la gente de mi edad”.
Para ello vuelve a la que parece la etapa de enamoramiento más infantil, ese momento de adolescencia en el que un regalo hecho a mano era una completa declaración de amor: “Collar con forma de corazón, méteme dentro, colgando de tu cuello… si te portas bien lo cierro y me quedo”, corea en el pegadizo estribillo del tema. A su vez todo el videoclip cuenta con un escenario valenciano, por lo que cualquier Z podrá reconocer el cauce del Turia como ese lugar emblemático para citas de parejas cuquis y modernas, que van en bicicleta y se tiran por el césped a darse besos.
“Las tomas que grabamos en el cauce del Turia están grabadas sobre las 5 de la mañana. Queríamos grabar lo que se llama "la luz azul", la primera del día. Imagina a un grupo de chicas jóvenes en la penumbra del río, nos cruzamos de todo: desde gente que volvía de fiesta a deportistas, y algunos se paraban a decirnos cosas y todo. Por suerte mereció la pena y al final ha quedado todo muy bien”, recuerda.