CALP. Poco más de seis meses han pasado desde que Calp reabrió la piscina cubierta y ya ha tenido que cerrarla. El Ayuntamiento ha informado de que ha iniciado los trámites para rescindir el contrato con la empresa gestora del recinto ante el “incumplimiento” del contrato de concesión.
El gobierno de Calp ha tomado esta decisión al “constatar el reiterado incumplimiento de las obligaciones previstas en el pliego técnico, como incumplimiento de horarios, de provisión de suministros, ausencia de servicio de socorrismo durante el horario de apertura”.
Desde el consistorio han informado de que se dejará de abonar el canon que tenía asignado esta empresa para poder hacer frente al servicio, del que también podía obtener beneficios con los cursos y los abonados al recinto acuático.
De hecho, la concesión, que tuvo lugar a finales del pasado año, para que la piscina abriera el 9 de enero de este año, contemplaba el pago a la empresa de 37.000 euros. Ahora, han precisado desde el Ayuntamiento, van a iniciar un proceso para estudiar el “tipo de gestión con la que se prestará el servicio en el futuro”.
Pero ante esto, “dado que los plazos y términos de resolución pueden prolongarse y ya que hasta la resolución definitiva no se podrá prestar el servicio de nuevo”. Desde el Ayuntamiento han indicado que los usuarios que ya han abonado la prestación, pero que no están recibiendo el servicio, que deben solicitar al consistorio la devolución del dinero mediante instancia en la que se acredite el pago”.
La apertura de la piscina de Calp se demoró hasta enero de 2023. El recinto cerró con la llegada de la pandemia y la empresa que tenía la anterior concesión ya no regresó, dado que le quedaban unos meses de contrato.
Tras esto, el Ayuntamiento inició un proceso de revisión y de reforma de la piscina, con obras de mejoras en el vaso y una actuación de mejora de todo el recinto, donde destacó la renovación de sistemas de termotecnia y electricidad. Estos trabajos y el proceso de concesión, demoró la apertura hasta enero.