ALICANTE. "Estamos con bronca", así de expresivo se mostraba este domingo Lucas Boyé tras el encuentro con el Rayo Vallecano, en el que el Elche caía por 2-1.
El delantero ítalo-argentino del Elche decía sentirse así en los micrófonos de Movistar +, sobre el verde recién resembrado del estadio de Vallecas, solo unos segundos después de que hubiera finalizado el choque en el que Boyé fue el autor del tanto de su equipo.
"Empezamos ganando, sabíamos que era un partido difícil y nos dan la vuelta al resultado; nos deja muy enojados, pero no queda otra que seguir", explicaba el futbolista del Elche, que estrenaba su cuenta goleadora en el presente curso liguero y que este domingo elevaba a 385 los minutos que ha jugador en partido oficial en esta campaña y a 3.181 aquellos en los que ha defendido la camiseta franjiverde.
"Nos ha faltado tener la pelota, especialmente en el segundo tiempo", lamentaba Boyé, que apuntaba también a la presión ejercida como el rival o la coincidencia de los primeros cambios del Elche con el segundo gol del Rayo como otras de las razones para las que el duelo no se hubiera desarrollado como deseaban, al tiempo que abogaba por "pensar en el siguiente partido".
El Elche recibirá el próximo sábado (18:30 horas) al Espanyol, que la noche de este lunes juega en el RCDE Stadium con el Cádiz.
