El alcalde, Luis Barcala, introduce la mano en la figura representativa de "La Boca de la Verdad" que forma parte de la Hoguera Oficial. ALICANTE. Dos asesores municipales relacionados, pero contratados por circunstancias diferentes: David Servando no es un desconocido para el Partido Popular (PP) como si pudo haberlo sido Miguel Ángel Redondo. Esa es la conclusión que se desprende de las explicaciones facilitadas por el alcalde de Alicante, Luis Barcala, respecto a la contratación de Servando como cargo de confianza de su equipo de Gobierno. Como ha contado este diario, Servando fue el abogado que representó a Redondo en una causa relacionada con una cuestión de índole personal (un caso de supuesto abandono familiar). Sin embargo, según el primer edil, ese vínculo de tipo profesional entre Servando y Redondo (según fuentes consultadas, ya terminada) no guarda ninguna relación con el hecho de que los dos hubiesen sido contratados como asesores.
Según Barcala, "Servando lleva colaborando con el PP desde 2015 en el área jurídica y, evidentemente, no se le ha contratado por quién fuese uno de sus clientes; lo que no se me puede exigir a mí es que yo sepa quiénes son o han sido clientes suyos y me parece desproporcionado que se establezcan relaciones que nada tienen que ver", explicó, en respuesta a preguntas de Alicante Plaza, después de haber rechazado inicialmente atender a medios, en una convocatoria pública relacionada con las fiestas de les Fogueres (Barcala se disculpó por haber eludido la pregunta inicialmente y aseguró que no tenía nada que ocultar).
El primer edil niega que el vínculo de tipo profesional entre Servando y Redondo tenga relación con su contratación como asesores
En esta línea, incidió en que había hablado con el propio Servando este lunes: "Le he preguntado, me ha confirmado que fue cliente suyo y no hay más; desde luego no se me pasa por la cabeza destituirlo", explicó, al recalcar que la de Servando y Redondo eran situaciones distintas. Sobre Redondo, Barcala ya había manifestado, el pasado miércoles, que se le contrató "por sus muy buenos contactos" y que desconocía que fuese conocido de Belmonte o que hubiese visitado diversas dependencias municipales o que hubiese participado en reuniones con diversas entidades sociales junto a ella. Es más, insistió en que ese no había sido el motivo que había generado una pérdida de confianza y su cese posterior, sino el supuesto contenido de su declaración en sede judicial en relación a esa causa de índole personal, difundida a través de los medios de comunicación.
Sea como fuere, tanto Compromís como Ciudadanos (Cs) incidieron este lunes en reclamar explicaciones al primer edil en relación a las informaciones sobre la contratación de asesores que vienen trascendiendo en las últimas dos semanas. Barcala reiteró este lunes que aceptaría la solicitud presentada por los grupos de la oposición y que comparecería en el pleno ordinario del próximo jueves para volver a ofrecer explicaciones sobre la incorporación de Redondo.
