Así son (fueron) 365 días en la vida Perceval Graells: un debate entre tiempo e identidad 

ALICANTE. Timing es el resultado de la unión de dos series de la artista Perceval Graells bajo los títulos Untold tales y 365 Degrees. Así lo define la comisaria Lucía Romero Segura sobre la muestra de la artista alicantina Perceval Graells que desde este martes y hasta el próximo 18 de diciembre se puede ver en la Casa Bardín, sede del Instituto de Cultura Juan Gil Albert. La exposición forma parte de la convocatoria Arte en la Casa Bardin que cada año organiza el instituto, con una selección de seis propuestas. 

¿Qué transmite Perceval Graells a través de su relato creativo? "Timing muestra cómo ir más allá de la imagen; nos hace recapacitar sobre sus tomas de decisión para intervenir de una manera u otra cada pieza y profundizar en sus estados vitales; en definitiva, en cómo nos quiere trasladar cada una de sus emociones en un único espacio", añade la comisaria. Así, en el caso Untold tales,  Perceval Graells muestra un trabajo realizado durante su estancia en Estados Unidos, tras encontrar un álbum anónimo de fotografías. Este material gráfico la induce a experimentar sentimientos de nostalgia y pérdida de identidad que observa en los diferentes personajes. A medida que trabaja el material, medita sobre las historias olvidadas que contienen y actúa sobre las imágenes con el fin de ir creando una segunda historia. Se trata de una manera de trabajar que se repite constantemente: la mayoría de las creaciones de Perceval retratan o expresan las experiencias de sus viajes y con el mundo que le rodea, utilizando, para ello, un lenguaje no descriptivo inspirado en las emociones y los sentimientos. 

Esta práctica es todavía más evidente en 365 Degrees, en la que retrata sus emociones y vivencias a través de 365 capturas creativas, dispuestas en Casa Bardin como si de un calendario se tratase: están ordenadas de acuerdo con los meses de su estancia en Estados Unidos. "Todo ello construye un mapa cronológico, que se entiende a modo de calendario para que el espectador pueda percibir los cambios estacionales y la evolución de la obra", añade Lucía Romero. La propia Perceval Graells da detalles de cómo su el proceso de creación. "Iba a todas partes con mis lapices y cada día retrataba los sentimientos de esa jornada; a veces me acostaba sin haber hecho el trabajo del día y me tocaba levantarme y hacerlo. Y así durante 365 días". El tiempo y su identidad son los rasgos que unen las dos muestras en una con el objetivo de ofrecer "un concepto evolucionado del análisis del tiempo y su inherencia dentro de nuestra realidad". Como resume Lucía Romero, "posiblemente el proyecto  más íntimo y personal de la artista, encontramos el tiempo como elemento común pero conceptuado como si fueran dos ventanas temporales transversales en su realidad. Una de 12 meses; otra de 365 días. El resumen de una estancia, la interpretación de un viaje, según lo aprecie el público.