ELCHE. A pesar de la primera propuesta de edificio cohousing que planteó Pimesa en el barrio de Travalón, finalmente será un edificio intergeneracional, como estaba previsto, pero únicamente para alquiler y no con opción de venta o alquiler con opción a compra. Una consecuencia de las tendencias del mercado, pero también del propio concepto del inmueble, que tendrá un diseño vanguardista que contará con huertos urbanos, gimnasio, biblioteca, cafetería, un gran patio para encuentro vecinal y sala multiusos para encuentro, cultura y otras actividades.
A este respecto, sobre la financiación del proyecto, Pimesa, promotora de la iniciativa, está pendiente de una convocatoria de libre concurrencia que lanzará la Generalitat Valenciana orientada a promotores que quieran construir vivienda de alquiler. Una línea que podría sufragar una parte del inmueble que puede estar en torno a los 5-6 millones de euros, pero no su totalidad. Se trata precisamente de una apuesta para fomentar este tipo de vivienda, ya que a las constructoras no les interesa levantar estos edificios porque tardarían años en recuperar la inversión con el alquiler.
A esta tendencia en el mercado hay que sumar que la empresa municipal no quiere que este proyecto permita la venta de las viviendas, ya que entiende que esto podría romper el 'contrato social' que se busca con esta iniciativa intergeneracional que tiene como fin último romper con la soledad de muchas personas mayores. Poner a la venta estos pisos podría suponer especulación con los propietarios, mientras que se entiende que con el alquiler se 'ata' a ese compromiso de vida común en el edificio. De forma puntual Pimesa cuenta con viviendas de alquiler en el edificio La Magrana porque viene de la época en la que construía VPO. Al llegar la crisis optó por el alquiler con opción a compra para darle salida ante el cierre del crédito bancario con el estallido de la burbuja inmobiliaria.
Asimismo, desde el medio municipal entienden que es un proyecto difícil por el coste, y asumen que supondrá adaptar la forma de financiación del propio ente, ya que tendrá que pedir un préstamo para pagar el inmueble. Independientemente de que la Generalitat sufrague parte del mismo. Algo que a día de hoy Pimesa podría asumir al tener un endeudamiento casi inexistente y unas cuentas saneadas. Obviamente es un cambio importante que supondrá un punto de inflexión también para la empresa, y como tal se tendrá que aprobar en el Consejo de Administración.
En cuanto al inmueble, con un moderno diseño realizado por el despacho ilicitano Gea Arquitectos por 98.000 euros, tendrá un total de 72 viviendas; 11 de un dormitorio, 48 de dos y 13 de tres. Se ubicará en un solar de 2.168 m2, en la calle Obispo Maestro Ángel Llorca 14 (sector E-5), y contará con una planta sótano así como con 81 plazas de aparcamiento. Se permiten siete plantas. Su objetivo es influir decisivamente en cómo conviven sus inquilinos, desarrollando una tipología edificatoria que promueva valores personales de convivencia y comunidad. Una apariencia externa elocuente, pero cuya importancia reside en su arquitectura hacia el interior a través de los espacios diseñados: viviendas independientes y espacios comunes donde compartir vida.
El espacio que nuclea el edificio es el patio central, con las instalaciones deportivas, los jardines, huertos y equipamientos comunes a su alrededor. Además de punto de encuentro también mantendrá una temperatura estable en el edificio a lo largo del año, dado que el patio proporciona iluminación y ventilación natural, "actuando como punto de conexión con la naturaleza". Señala el informe de los arquitectos. La idea es que dotando de un gran número de prestaciones al edificio se fomente un envejecimiento activo en un piso propio pero contando con una comunidad de personas afines y actividades y servicios compartidos.
La estrategia adoptada consiste en ubicar las viviendas en manzana cerrada pero esponjada sobre un patio central que se convierte en plaza de encuentro social y programas colectivos; un espacio de transición entre la unidad privativa (verde oscuro) de la vivienda y el espacio público (verde claro). El edificio se caracteriza por la convivencia de dos fachadas, la exterior y la interior, ubicada en el patio interior, sobre la que giran los pasillos de acceso a las viviendas. Las plantas se proponen intercalando pequeños jardines que, junto a los amplios zaguanes, fomentan las relaciones sociales en el interior. En cada una habrá viviendas de diversa tipología para atender las necesidades intergeneracionales, con acceso desde el patio central y todas ellas abriendo al exterior y con distintas orientaciones. Las viviendas de un dormitorio tendrán 37,81 m2, las de dos 46,30 m2 y las de tres habitaciones son 78,17 m2; todas con una superficie exterior proporcional al interior del piso y adaptadas a nivel de accesibilidad y otras necesidades según la edad.
Asimismo, además de los espacios amplios en la planta baja , también se encuentra una zona destinada al deporte. Un amplio paseo exterior donde se dispondrán gran variedad de aparatos de gimnasia, destinados a mantener una vida activa. Por su parte, la terraza es uno de los lugares clave del edificio. Un espacio de encuentro por excelencia, donde pueden tener lugar comidas, cuidar de los huertos urbanos, tomar el sol o acudir a la cafetería.
En cuanto a la arquitectura, uno de los términos de moda en los nuevos proyectos es lo 'biosostenible', con eficiencia en el uso de recursos, materiales y energía; aprovechamiento de recursos ambientales disponibles; generación de espacios verdes y reducción de costes del mantenimiento del inmueble y las viviendas. Además, la disposición de estas permite que siempre tengan ventilación cruzada. Por su parte, la terraza alberga un campo solar fotovoltaico en convivencia con los huertos colectivos y el agua servirá para refrescar los patios interiores y, a la vez, para transportar parte del calor y frío en las viviendas.
La principal medida de control del soleamiento pasa por retranquear las terrazas, por los beneficios bioclimáticos que dicha solución aporta. Los jardines situados en las distintas plantas, en huecos pasantes de la fachada al patio interior, van alternando su posición para mejorar la ventilación de la propuesta, al favorecer la continua renovación del aire.