BENIDORM. Uno de los problemas de tráfico que más perjudica a Benidorm tiene los días contados. La FGV ha licitado los dos contratos que servirán para dar un acceso subterráneo por la avenida Beniardá, que está limitado en la actualidad por un paso a nivel que obliga a los vehículos a parar para que circule el Tram. Como ha venido contando este diario, la solución que se va a adoptar responde a un paso inferior que irá por debajo de la vía del tren que ahora divide la carretera que da acceso a la ciudad, como se puede ver en la imagen que encabeza la noticia.
Así, el proyecto de FGV pasa por hacer dos carriles de subida y otros dos de bajada, que ya no dependerán de la llegada del Tram para cortar el tráfico rodado. No obstante el paso peatonal seguirá estando operativo por la superficie.
La intención de la Generalitat es que las obras comiencen en 2022. Para ello, han previsto una inversión de casi siete millones de euros para las dos licitaciones, que se tendrán que resolver a principios de año. Tras esto, pasará un plazo de ejecución de 16 meses para finalizar los trabajos.
El gobierno local lleva años reclamando que se realicen estas obras que servirán para evitar los diferentes atascos que se generan debido a la cantidad de vehículos que acceden o salen de la ciudad por esta avenida: unos 26.000 al día, según los datos del Ayuntamiento.
De forma paralela a las actuaciones que dependen de FGV, el Ayuntamiento tendrá que asumir las obras para la tranviarización del tren, que además de en Beniardá, se hará en su paso por la avenida de Andalucía y en la nueva Estación Intermodal. El cambio implica que el Tram funcione por estos tramos como si fuera un tranvía, con sus propias señales de circulación. Eliminará los actuales pasos a nivel y los sustituye por cruces semafóricos iguales a los existentes en otros municipios como la Vila Joiosa, El Campello o Dénia.
