El director del Teatro Principal, Francesc Sanguino, y la edil de Cultura, María Dolores Padilla.ALICANTE. Con la entrada de la Generalitat Valenciana en la copropiedad del Teatro Principal, junto al Ayuntamiento de Alicante y el Banco Sabadell, se abre un escenario de mayor colaboración entre el coliseo alicantino y el Teatro Arniches, quien sí contaba ya con la administración autonómica como soporte. Un vínculo que ahora comparten y que les convierte, más que nunca, en buenos hermanos. Porque, si ya existía colaboración entre ambos espacios, ahora deben afinar todavía más ese esfuerzo para no competir entre ellos ni solaparse.
Así lo explicaron, tanto el director del Teatro Principal, Francesc Sanguino, como la edil de Cultura, María Dolores Padilla, durante la presentación de la programación de primavera, elaborada antes de oficializar la entrada de la Generalitat. Es por eso que, en este conjunto de eventos que se acaban de presentar, todavía no se ha podido apreciar su participación y su aporte financiero. Será un poco más adelante cuando se implicará de lleno. De hecho, pronto se citarán, con el objetivo de valorar la implicación de la Generalitat en la programación, con contenidos complementarios que no sean rivales.
“Hay que tematizar los teatros”, afirmaba Padilla en la presentación, apuntando que las nuevas bases que se van a asentar para estos espacios se verán en una próxima reunión, la cual afrontarán “con mucha ilusión por parte de los tres”, según comentó. Y es que, en opinión de Sanguino, con este nuevo escenario “se ha generado un binomio”, por lo que destacó que el Arniches debe seguir llevando a cabo su política de campaña educativa y divulgativa, con la que no tratarán de competir. “Debemos programar en función del tamaño de los espectáculos y no de la lengua o de otros elementos, porque el Teatro Principal es un espacio que está concebido para los grandes formatos y para la música”, aseguraron ambos en la rueda de prensa celebrada este jueves.
En ese sentido, el Principal presenta una programación de primavera que engloba desde febrero hasta junio y que recupera el protagonismo para la música y los conciertos de la mano de Ismael Serrano, Manolo García, Funambulista o Music has no limits. Pero el mes de febrero empieza fuerte en cuanto a teatro se refiere con “cuatro bombas”, como resaltó Sanguino, que se enmarcan en la continuación del Festival Internacional de Teatro Clásico de Alicante y que se unen a lo avanzado en diciembre, donde destacaba Lola Herrera con Cinco horas con Mario, quien regresa al Principal treinta años después.
Pero el primero de esos platos fuertes es El rey Lear, de la compañía andaluza Atalaya. Por su parte, los portugueses de la Companhia do Chapito paralizan su actividad habitual en su tierra natal para visitar por primera vez Alicante con Electra, obra clásica en formato cómico. Por otro lado, Rafael Álvarez El Brujo representa y dirige Esquilo, nacimiento y muerte de la tragedia, después de su estreno en Mérida. Todo ello sin dejar de contar con la pieza que supone el retorno de Lolita a la ciudad: Fedra.
La artista alcoyana Sol Picó estrenará a nivel nacional su próximo espectáculo y será durante el mes de abril, aunque todavía no figura en el programa ya que se están terminando de perfilar todos los detalles de la obra. La bailarina acudirá junto al Ballet de la Generalitat, acompañada por siete bailarines que han sido seleccionados a través de unas audiciones en las que han participado hasta cien candidatos. De esos siete seleccionados, cinco son alicantinos, procedentes de la Jove Companyia de Danza d'Alacant, y estarán junto a Sol Picó en esta producción valenciana que se estrenará en las tablas del Teatro Principal, que en palabras de Padilla y sanguino, “es uno de los más visitados de España”. Aunque no se facilitaron datos, próximamente darán a conocer los relativos a la temporada 2017/2018, en cuanto a la tasa de ocupación de los espectáculos que requieren entrada.
A lo largo de la temporada se podrá disfrutar de todo tipo de espectáculos que incluyen ópera, circo, jazz y actividades para el público infantil, con el objetivo de organizar un programa “abierto y completo, que recupera la música y que cuenta con representación local en toda clase de géneros”, según explicó Padilla. Un programa que se clausura con contenido para los más pequeños, el 15 de junio, con el Cantajuego. Sin embargo, en el libro de programación se podrá encontrar el logo 'Entrada Canguro' con el cual se especifica cuáles son los shows que cuentan con un servicio especial de 'canguro' en el que introducir a los niños y niñas de 0 a 8 años en el mundo de las artes escénicas, a través de talleres y espectáculos para ellos en paralelo, mientras los mayores pueden disfrutar de una obra de teatro o un concierto. Un programa que está resultando todo un éxito y que, tras su experiencia piloto, se seguirá desarrollando.
