Ángel Olmo Quesada recibe el reconocimiento como Vecino Ejemplar de Benidorm

BENIDORM. Ángel Olmo Quesada ya es Vecino Ejemplar de Benidorm, una distinción que este viernes le han entregado el Ayuntamiento de la ciudad y el Consejo Vecinal como reconocimiento a su contribución a la enseñanza de cientos de niños de la ciudad, así como su aportación cultural, social y humanitaria. La entrega de esta distinción, inicialmente prevista para el pasado 31 de octubre y pospuesta por la DANA, ha tenido lugar este mediodía en el Salón de Actos del Ayuntamiento de Benidorm, en un acto que ha reunido a una numerosa representación de la Corporación municipal y de la sociedad civil benidormense y en el que el alcalde Toni Pérez ha destacado “la vocación como servidor público” de Ángel Olmo y su “enorme contribución” para mejorar la enseñanza y el sistema educativo en Benidorm.

El premio al Vecino Ejemplar es un reconocimiento que Consistorio y Consejo Vecinal conceden todos los años a las personas “en las que concurren valores personales, cívicos y éticos destacados y destacables” que pueden servir de referencia e inspiración a para otros ciudadanos. En este caso, la candidatura de Ángel Olmo como Vecino Ejemplar de 2024 ha estado avalada por dos entidades de reconocida trayectoria en Benidorm: la Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón y de la Buena Muerte y la Societat Musical La Nova de Benidorm, entidades de las que forma parte y en las que ha volcado buena parte de su vida. De ellas, el jurado tuvo en cuenta la aportación de Ángel Olmo a la enseñanza y educación de decenas de generaciones de benidormenses en su condición de maestro, así como a la cultura local y a la sociedad civil, además de su faceta humanitaria.

El primer edil ha expresado que “de todos los reconocimientos que tenemos la oportunidad de compartir en esta ciudad, si hay uno que reúne una serie de condiciones que lo hacen muy diferente es este reconocimiento al Vecino Ejemplar”, ya que “es un premio siempre acertadísimo, porque nace del pueblo, del movimiento vecinal y de asociaciones de toda índole y en el que, además, la Administración no interviene”. Por ello, Toni Pérez ha valorado que Ángel Olmo “ha sido un gran servidor público que ha contribuido a hacer más grande esta ciudad”, tanto desde el plano profesional como en el asociativo, el cultural o el humanitario.  

 Asimismo, el alcalde ha  recordado en su discurso que “siendo Ángel Olmo ya director del entonces colegio número 12, más tarde Els Tolls, protagonizó, con esos cuadrantes que hacía de escolarización y junto con otros docentes, la creación de más de 4.000 puestos escolares públicos en esta ciudad en tan solo una década, desde la Educación Infantil hasta los niveles de Bachillerato y Formación Profesional, siempre de forma callada, siempre elegido por sus compañeros directores y formando parte de la comisión de escolarización de Infantil y Primaria y atendiendo fuera de horario a las familias de ‘nouvinguts’ que llegaban a la ciudad y a cuyos hijos había que escolarizar”.

Por último, Toni Pérez también ha destacado su aportación al movimiento festero, musical, cultural y religioso de la ciudad, para concluir que “cuando hace 50 años, que se cumplirán el año que viene, Benidorm te dio la bienvenida a esta ciudad, Benidorm estaba dando la bienvenida a un gran vecino, a un vecino ejemplar de los de verdad”.

Por su parte, el homenajeado ha iniciado su discurso con unas palabras de recuerdo a la tragedia en forma de DANA que obligó a posponer el acto de entrega de este galardón, inicialmente previsto para el pasado 31 de octubre, tras lo cual ha expresado su “gratitud, emoción, alegría y satisfacción” por este reconocimiento. “No esperaba recibir un premio, una distinción tan importante por algo que he realizado con ilusión, con cariño y sin esperar nada a cambio”, ha agregado. Ángel Olmo ha hecho un repaso de cómo, junto a su esposa Virtu, llegó en el año 1975 a Benidorm tras aprobar una oposición para el Banco Alicantino de Comercio y que, a pesar de todo, su vocación de maestro le llevó a acabar abandonando este puesto para centrar su vida en la enseñanza.

Asimismo, ha hecho un repaso de su amplia trayectoria dentro del sistema educativo de Benidorm, así como su vinculación con otras entidades sociales y culturales, como la Unión Musical y la Societat Musical La Nova, la Comissió de Festes Majors Patronals, la Asociación de Belenistas o la Cofradía del Cristo del Perdón y la Buena Muerte y Cáritas de la parroquia de la Almudena, sin olvidar tampoco las referencias a su localidad natal, la jiennense Ventas del Carrizal, de cuya historia, tradiciones y costumbres publicó un libro en el año 2012.

 
En el acto también han participado Teresa Garrido, como encargada de la concesión de este galardón en el Consejo Vecinal, así como Eusebi Chiner, distinguido en 2017 y portavoz del jurado, además de la concejal de Participación Ciudadana, Ana Pellicer, y la profesora del Conservatorio Profesional de Música José Pérez Barceló, Aroa Blanco.

Desde que se puso en marcha esta distinción ciudadana, el Premio Vecino Ejemplar ha reconocido la trayectoria y valores de benidormenses como Francisco Fenoll Rostoll (2011), Antonio Gonzaga Picó (2012), Francisco Alvado Barber (2013), Carmen Cerdá Garrido (2014), María Rosa González Mata-Rubio y Juan José García Albarrán (a título póstumo en 2015), Casimiro Vila Esteban (2016), Eusebi Chiner Vives (2017), María Zaragoza Lloret (2018), Jesús Rosillo Jiménez (2019) y Bárbara Pérez Llinares –María del Sufragio–, premiada en la edición de 2023. 

Sobre Ángel Olmo Quesada

Nacido en Las Ventas del Carrizal (Jaén), el 3 de febrero de 1948, Ángel Olmo Quesada está casado y es padre de dos hijos y abuelo de tres nietos. Realizó estudios de Magisterio y, tras dar clase en distintos colegios de su Jaén natal y de la provincia de Alicante, como Guardamar de Segura o Petrer, en el año 1975 dejó el mundo de la docencia y se trasladó a Benidorm para trabajar en el Banco Alicantino de Comercio, del que fue director durante tres años.

Posteriormente, en el año 1981 aprobó las oposiciones de maestro y el primer colegio donde ejerció con plaza propia fue el CEIP Bautista Lledó, formando parte del equipo directivo. A éste le siguieron el CEIP Ausiàs March, Mestre Gaspar López y Serra Gelada, centro que contribuyó a poner en funcionamiento. Durante los años de más afluencia de matrícula también colaboró con el Ayuntamiento de Benidorm, en la Concejalía de Educación, como coordinador de matrículas para todas las nuevas familias que llegaban a Benidorm. En el año 1997 es nombrado director del nuevo colegio Els Tolls, el centro público más grande de la ciudad, donde ejerció la docencia y dirección hasta su jubilación en el año 2008.

Asimismo, desde su llegada a Benidorm Ángel Olmo Quesada ha formado parte de diferentes colectivos culturales y sociales. Durante más de 20 años fue miembro de la junta directiva de la Unión Musical de Benidorm, bajo la presidencia de Jaume Antón. Tras la fundación de la Societat Musical La Nova en 2021 también ha sido miembro de su directiva, como tesorero y vicepresidente. Asimismo, ha formado parte de la Comissió de Festes Majors Patronals como mayoral en distintas ocasiones; mayoral de la Comissió de Sant Antoni en 2008 y peñista durante más de dos décadas en la Penya Con Sal.

Además, es cofrade de la Cofradía del Cristo del Perdón y de la Buena Muerte desde 2014 y colaborador habitual de Cáritas en la parroquia de la Virgen de la Almudena, donde de forma voluntaria y altruista realiza un trabajo activo de atención a las personas con vulnerabilidad y participa en el reparto de alimentos a personas en riesgo de exclusión.