ELCHE. Desde el pasado 9 de enero, y con un plazo de finalización de cinco meses, la calle Federico García Lorca está siendo objeto de obras de renovación de las redes de agua potable y alcantarillado. Las conducciones de alcantarillado actuales son de hormigón y están al final de su vida útil, en un estado ya muy deteriorado. Además están bajo la zona de aparcamiento, lo que acelera su envejecimiento por las raíces del arbolado. Una actuación necesaria, pero que sin embargo está generando problemas a los vecinos, según denuncian, así como a comerciantes. Tienen pensado entregar una queja formal al Ayuntamiento.
En general, algunas de las problemáticas vienen, según denuncian, por la sensación de "caos" que viven, al asegurar que "no están señalizadas las entradas a la calle, cambian el paso constantemente, hay gente cayéndose...", explica una de las comerciantes, aseverando que una frutería de la zona "ha tenido que cerrar, en el taller tienen problemas para el acceso"... y pequeñas molestias diarias de pasarelas que se quitan en accesos o portales. En alguna de estas problemáticas ha tenido que intervenir la policía local, apuntan, para resolver alguna de esta situaciones.