ALICANTE. Del Internet de las Cosas (IoT) al Internet del Espacio (IoS). En los últimos años y, especialmente, proyectos como los de Space X, de Elon Musk y, en especial, Starlink, que quiere crear para una "constelación de satélites de internet" para llevar este servicio de banda ancha a escala y cobertura mundial, se está convirtiendo en un hecho. Este tipo de satélites, que cada vez tendrán más usos, requiere, a su vez de más capacidad y velocidad para funcionar. Lo que se traduce en la necesidad de una mayor potencia para llevar a cabo sus funciones. Y, precisamente en eso, en aumentar la potencia de este tipo de satélites -sin peligros- trabaja en estos momentos el Grupo de Microondas y Electromagnetismo Computacional Aplicado (Gmeca), de la Universidad de Alicante (UA). Trabajan en un método para que pueda aumentar esa potencia evitando, a su vez problemas con los efectos corona. Este fenómeno eléctrico, que se produce por la ionización del gas que rodea a un elemento conductor cargado, puede inutilizar y dejar inservibles los satélites. El mismo efecto inutilizador, pero que se produce en condiciones de presión atmosférica cero (en el espacio) es el efecto multipactor, algo que también tratan de evitar en el grupo Gmeca de la UA. Así lo explica su coordinador, Stephan Marini, hablando de la labor en el "Modelado avanzado y caracterización de nuevos componentes de alta frecuencia en guía de onda y tecnología planar para las aplicaciones espaciales emergentes". Marini, además, ha trabajado y sigue en relación con otro equipo de la UMH que lideraba el proyecto anterior a este.
Desde hace algo más de un año, este equipo trabaja en este tipo de soluciones y, desde el 1 de junio de 2020 lo hace, además, financiados por un proyecto de la convocatoria Retos I+D+i del Ministerio de Ciencia e Innovación. Este impulso será por tres años y es la primera vez que Gmeca dirige uno de estos planes. No obstante, el proyecto financiado por el Gobierno forma parte de otro plan que coordina, a nivel global el catedrático de la UPV, Vicente Boria. De este trabajo marco salen cuatro ramas. Una de ellas, la del grupo de la UA junto a la UMH. Otro proyecto lo coordina la UPV y otro la Politécnica de Cartagena.
El equipo de Stephan Marini se encarga, de forma específica, de la parte en que los nuevos dispositivos espaciales emergentes (como los satélites de Starlink) puedan tener un manejo de potencia más alto evitando los temidos efectos corona y multipactor. El grupo de Microondas y Electromagnetismo Computacional Aplicado de la UA es un equipo joven, que nació hace unos cuatro años en la Universidad de Alicante y que al principio solo contaba con la labor de Marini. Ahora son cuatro profesores trabajando, bien a tiempo completo o bien a tiempo parcial, con un doctorando y alumnado de máster y grado.