SAN FULGENCIO. El segundo intento fallido de moción de censura en San Fulgencio, ejecutado ayer, deja una situación inusual en el municipio. El PSOE, junto al edil díscolo del Partido Independiente Por las Nacionalidades (PIPN), Alain Franz Vandenbergen, tienen mayoría en el Pleno. Sin embargo, la negativa de la mesa de edad a debatir la moción de censura de los socialistas, con el fin de llevar a José Sampere a la Alcaldía, hace que ese sillón siga en manos del popular José María Ballester. Con los populares y los independientes en minoría, que gobiernan juntos desde las elecciones de 2023, se abre un escenario que deja entre las cuerdas la gobernabilidad del municipio.

El PSOE ya anunció ayer que acudirá a los juzgados por la vía penal, mientras espera que la vía administrativa se pronuncie tras la demanda interpuesta tras el primer intento fallido de moción de censura el pasado 18 de junio. Retirada de sueldos, revocación de la representación de los populares en órganos de representación municipal como el Consorcio de residuos y otras medidas de presión para acorralar al equipo de gobierno ya se pusieron ayer también sobre la mesa. Ahora, el bipartito de PP y el resto de ediles del PIPN deberán resistir el "asedio" y la presión de los socialistas durante los dos años que quedan de mandato. Eso, si los tribunales no se pronuncian antes avalando el visto bueno a la moción de censura, cuya presentación y debate ya avala el secretario municipal, cuyo criterio fue desoído por la mesa de edad. 

En medio de esta tormenta política en San Fulgencio, desde el PSPV-PSOE pedían ayer dimisiones. Los socialistas no pasaron por alto el hecho de que ningún cargo, concejal, alcalde o representante de los populares acudiera ayer a apoyar al todavía alcalde popular, José María Ballester, en esta huida hacia adelante que supuso tumbar por segunda vez la moción de censura usando que la mesa de edad está compuesta por dos ediles populares para levantar la sesión sin debatir dicha moción. 

El PSPV-PSOE pidió ayer a Carlos Mazón que expulse a los ediles del Partido Popular que han impedido que se vote la moción de censura en San Fulgencio, que se tendría que haber producido este viernes por segunda vez después de que en el mes de junio la mesa de edad impidiera que el pleno municipal se pronunciara al respecto. Así se ha pronunciado este viernes el secretario de Organización del PSPV-PSOE, Vicent Mascarell, quien ha anunciado que los socialistas valencianos instarán de nuevo a la secretaría municipal que convoque por tercera vez el pleno para que este se pueda pronunciar sobre la moción de censura y que respetar lo que la mayoría de los ciudadanos de San Fulgencio quiere.

En este sentido, el dirigente socialista ha señalado que "de nuevo el municipio de San Fulgencio ha sido testigo de un ataque contra la democracia inédito al impedir que se vote una moción de censura" y ha remarcado que "es una situación intolerable que debe ser respondida con una decisión drástica". Además, ha insistido en que "lo ocurrido es intolerable y va contra los derechos fundamentales de los ciudadanos" y ha subrayado que "no se puede permitir que un grupo político utilice el poder institucional para bloquear la voluntad democrática de la mayoría del pleno". Con todo ello, Mascarell ha afirmado que "Mazón no puede mirar hacia otro lado y mucho menos convertirse en cómplice de este tipo de actitudes que van contra los cimientos de nuestra democracia": "Esperamos decisiones por parte del Partido Popular de la Comunitat Valenciana", concluyó.