VALÈNCIA. La Asociación Juristes Valencians se ha reunido este viernes con la directora general de Patrimonio Cultural de la Generalitat, Marta Alonso, para reclamar que el Gobierno autonómico haga las gestiones necesarias para dos de los volúmenes más importantes del patrimonio oriolano, como son el Llibre dels Repartiments o el Libro Almúnia, vuelvan a la Comunitat Valencuana, y en concreto, a los archivos de Orihuela. El Llibre dels Repartiments sigue en la Biblioteca de Cataluña; el Libro Almúnia, en Murcia. Juristes Valencians eleva esta petición a la Generalitat después de las múltiples peticiones al Ayuntamiento de Orhuela, que han caído en saco roto. Es decir, que el consistorio no ha hecho nada por intentar recuperarlos.
En el caso de El Almúnia, o "Libre de tots los actes, letres, privilegis y altres qualsevol provisions del Consell d'Oriola", es un recopilatorio elaborado por el notario Antoni Almúnia en el siglo XVII" y, según defienden desde la asociación "constituye una seña de identidad oriolana y valenciana". El texto, también conocido bajo el nombre de "Noticiario Oriolano", recopila multitud de documentos de la época foral oriolana entre 1265 a 1620, e incorpora los privilegios de Orihuela y también multitud de actos administrativos "de preferente interés histórico para los oriolanos", señalan desde la entidad. Juristes Valencians ya reclamó su devolución a las autoridades de Murcia en octubre de 2024.
La reivindicación del Llibre dels Repartiments es más constante, pero tampoco sin ningún avace, pese a las reiteradas peticiones de la Generalitat Valenciana y del propio ayuntamiento oriolano. Juristes Valencians lo reclamó en mayo de 2024, cuando presentó una petición formal a la Biblioteca de Cataluña, para exigir a la Generalitat y a la Diputación de Barcelona "la restitución inmediata al Ayuntamiento de Orihuela del Llibre del Repartiment d´Oriola, datado en 1310, seña de identidad oriolana y valenciana. El colectivo jurídico valencianista se sumaba así a la petición formal y pública que han realizado durante las últimas semanas tanto el Ayuntamiento de Orihuela como el Consell para que el documento vuelva a la ciudad oriolana. Pero nada más se supo.
Lo único, que la Biblioteca de Cataluña había aludido a un acuerdo con el Ayuntamiento de Orihuela, firmado supuestamente en 2009, para justificar la negativa a ceder el Llibre de Repartiments. Argumentaba que el acuerdo contemplaba dejar una copia digitalizada en los archivos oriolanos. Ahí quedó la cosa, pues en el consistorio no se tiene, o no se tenía, constancia de ese acuerdo.