SAN VICENTE DEL RASPEIG. Las elecciones en San Vicente del Raspeig han dejado un resultado ajustado entre la primera y segunda fuerza más votada. El PP ha logrado sobrepasar al PSOE, aunque por tan solo un concejal, obteniendo nueve los primeros y ocho los segundos. Traducido en votos, los populares se llevan el 31,81% (8.695 votos), mientras que los socialistas captan el 29,64% (8.101 votos). Un resultado más o menos esperado, al menos entre azules y rojos.

Y, aunque el auge de Vox también era una posibilidad real, no resultaba tan previsible que pasara de dos a cinco concejales en el municipio. Se ha consagrado, así como tercera fuerza con el 17,99% de los votos (4.917), lejos del 7,75% (1.867 votos) que consiguió en 2019. La formación ha cogido aire y en sus manos están las llaves del Ayuntamiento en favor del PP, con un bipartito de derechas en el que, si gobierna la lista más votada, la vara de mando recaería sobre Pachi Pascual.

¿Pero cómo ha logrado Vox duplicar su representación en San Vicente? Fuentes consultadas por Alicante Plaza han trasladado que, si bien el partido de ultraderecha no ha ganado en ninguna mesa electoral, sí ha quedado como la segunda fuerza más votada en la mitad de las mesas. En concreto, han sido dos las zonas causantes de su crecimiento: las urbanizaciones del norte (Villamontes, El Pozo San Antonio y El Sabinar) y Santa Isabel, un barrio históricamente socialista en el que ahora Vox ha resultado segundo, así como la urbanización Los Girasoles, donde el voto predominante ha sido la derecha.