ALICANTE. Plantear la ironía mediante la música. Esa es la esencia de Grabaciones Inocentes, el primer proyecto musical de Roberto Portillo, conocido artísticamente como Hernando. El músico, nacido en Albacete pero alicantino de adopción, publicó su primer EP 20 días antes de que España decretara el estado de alarma y ha dedicado parte del tiempo de confinamiento a escuchar y reescuchar las cinco canciones que componen el proyecto. Tanto ha sido así que ocho meses más tarde ha publicado la reedición de uno de esos cinco temas.
Ártico, que así se titula la afortunada, incluye en esta nueva versión una capa superpuesta a la voz principal, un piano eléctrico, coros afinados por Andrea Meliveo y un sintetizador "que le da un aire más bacalaero", apunta el músico. Una reinterpretación que se acerca a la que recogía la maqueta original, pero que Hernando descartó para sustituir por un arreglo para guitarra eléctrica. "Con esto he querido recuperar la idea inicial e, incluso, excederla y enriquecerla", manifiesta su intención.
Y es que esta reedición se salta la línea en la que fluctúa el EP, que se titula Grabaciones Inocentes precisamente por la sencillez de las canciones: "Antes de empezar a grabar yo tenía claro que quería traducir al rock lo que sonaba con mi guitarra; es decir, buscarle un sonido con banda a las canciones que yo tocaba solo", explica. Y una de las piezas clave en este proceso fue la voz de Hernando, manteniéndola pura, "sin muchos efectos ni coros", señala.