VILLENA. Mercadona no solo compra sus productos a grandes empresas con capacidad para generar enormes volúmenes de stock para la cadena líder de la distribución en España. De hecho, pequeñas y medianas empresas muy especializadas en un producto concreto se han beneficiado de la nueva política de la firma por los proveedores 'totaler' y su cercanía a los productores locales (especialmente para los frescos), para convertirse en proveedores de la firma que preside Juan Roig.
Es el caso de la empresa agrícola de Villena Molina y Azorín, una de las que nutre de cerezas al bloque logístico de Mercadona en San Isidro, desde el cual se surten los lineales de 172 supermercados de Alicante, Murcia y Albacete. Mercadona compra cerca de un millón de kilos de cerezas en la provincia, de los que aproximadamente un 25% han estado en los árboles de esta empresa a las afueras de la capital del Alto Vinalopó. Molina y Azorín, una empresa familiar que está ahora en su segunda generación, cultiva cada año unos 500.000 kilos, de los que aproximadamente la mitad son para Mercadona y el resto para otros clientes (fundamentalmente mercados locales, y exportación a Francia e Italia).
"Llevo en la cereza desde hace 40 años, empecé con mi padre", explica el gerente de la empresa, Vicente Molina (su padre, al que hace referencia, aparece al final de la entrevista para 'supervisar' el trabajo en el almacén). "Luego estudié un FP agrario y me incorporé a la empresa: empezamos a alquilar tierras y a plantar, porque nosotros sabíamos sacarle al suelo la rentabilidad que otros no". Hace ocho años, decidieron crear la SL con la que operan actualmente, ante el incremento del volumen de ventas y de plantilla. "Parte de nuestras tierras son alquiladas y otras las tenemos en propiedad, todas por la zona de Villena y La Cañada".