BENIDORM. La patronal hotelera de la Comunitat Valenciana, Hosbec, pide a la Generalitat Valenciana más flexibilidad y actualizar el decreto regularizador del alojamiento turístico. Para el presidente de la asociación, Fede Fuster, es el momento de "abrir un melón" para introducir cambios en la normativa actual que pone negro sobre blanco los requisitos para abrir un hotel.
Fuster dio una pincelada sobre estas peticiones en la jornada organizada este martes por el patronato de turismo Costa Blanca y la Diputación de Alicante para la presentación de las nuevas rutas de Ryanair, entre ellas, en el aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández.
El empresario aprovechó la presencia del secretario autonómico de Turismo, José Manuel Camarero, para pedir una "desregulación del sector hotelero" que permita construir un producto "más competitivo eliminando exigencias costosas y poco valoradas por los clientes y adaptando la oferta a la realidad de un mercado que va muy por delante de la regulación". Para Fuster es "como aplicar la filosofía de las compañías aéreas que pueden ofrecer transporte desde una base muy económica hasta un producto muy completo, pero es el cliente quién decide su composición y no la normativa aplicable para todos".
Fuster ha recordado que "el hotelero es un sector hiperregulado que tiene que competir en un mercado libre y que debe tener también criterios de flexibilidad. Además, el consumidor se puede ver muy beneficiado de estas políticas". De este modo, la patronal hotelera ha dicho este miércoles que está preparada para acometer una reforma del decreto regulador del alojamiento turístico, partiendo de esas bases de flexibilidad, modernidad, digitalización, uso de nuevas tecnologías de IA, así como un principio de menor intervención administrativa y más capacidad de autorregulación del mercado. "La realidad del sector va muy por delante de las leyes y no nos puede atropellar una normativa antigua y desfasada", ha recordado Fuster.
En conversaciones con Plaza, el hotelero ha explicado que el objetivo es actualizar el decreto porque "está muy anticuado", conteniendo exigencias que "ya no tienen sentido". Fuster, presidente también del Instituto Tecnológico Hotelero (ITH), indicó que hay tecnología que ya ha sustituido a algunos servicios presenciales que a día de hoy exigen por normativa. A modo de ejemplo, reseña la recepción 24 horas, para lo que ya existen alternativas para atender a los clientes de manera remota.
También menciona otros asuntos como la necesidad de contar con sala de lectura y de televisión para optar al reconocimiento de cuatro estrellas superior, que bajo su propia experiencia, no son útiles para los huéspedes: "Cuando alguien quiere ver la tele o quiere leer un libro o un hotel, se queda en la habitación", aclara.
En cuanto a la flexibilidad, Fuster señaló la importancia de que la administración pública conozca la necesidad de tener cierta libertad para diseñar el producto enfocado al cliente que buscan, y no al contrario, que sea la otra parte la que le diga al hotelero lo que es mejor para su establecimiento, "es el mercado el que debe determinarlo", apostilló.
Como se recordará, en agosto de 2024, la Conselleria de Turisme, en aquel entonces liderada por Nuria Montes como consellera, aprobó por decreto ley la modificación de la normativa reguladora de las viviendas de uso turístico. Sin embargo, esperan que en este caso sea un cambio más fácil para la administración autonómica.